Hello friends of Silver Bloggers today I want to share with you an experience that I just had, and they are one of those that make your day, fill you with motivation and definitely move you.
This morning, a little before seven o'clock, I arrived at a court near my house to have the third meeting of Biodanza with a group of people who have accepted the invitation for that purpose. Let me tell you a little bit about the context.
In June, I began my preparation as an instructor of this beautiful discipline called biodanza, in this first level, which lasts six months, I am required to form group to advance in training.
For this purpose, I prepared a space in the house and invited my husband and a sister to practice, they accepted with pleasure and their participation has helped me a lot to organize the classes, but I tell you a secret, neither of them feel feeling for the activity, they do it to collaborate with me and I thank them, but, the truth, I needed something more.
So I thought of calling some friends to accompany me in my training, however, I thought better of it, considering that possibly the situation is repeated, they come to support me, but they will not feel the pleasure, pleasure and enthusiasm that produces the connection with what we do (me, putting barriers, no, lie).
Then I said to myself: Friend, go out and look for the people you want, those luminous people as the song says, who are filled with good vibes and give themselves with affection to the present they are living.
In my daily walk I see a yoga group some days and others a dance group, the girl who gives dance therapy classes, I know her by sight, I approached her one of those mornings and I told her that I was looking for a group, that if I could, through her, invite them to form it, I explained that biodanza does not represent competition for her, she very kindly accepted.
I joined the dance therapy group, I made the approach, we agreed date and time for the first meeting. Four people attended with whom I started the activity, the following Saturday, three joined and today two more.
Here is where I stop, one of the people who arrived today is a lovely 92-year-old lady, with osteoarthritis and uses a cane. When I saw her arrive, I thought: my God, help me so that nothing happens to her and she enjoys the time.
And so it was, she listened to the initial reflection standing up, leaning on her cane, when I placed the first piece, and we all started to dance, she joined as if with great care, suddenly she handed me the cane and let go within her possibilities, she was radiant, she did the whole activity, when we said goodbye she grabbed my hands and thanked me saying that she had not danced for years, and she had such a divine time.
Today the theme was to deepen in the vital power, the one with which we say with our body and attitude I love and enjoy life, this lady, Rebeca, is an example of that living flame that if we cultivate it is present, no matter the age or many ailments, sometimes just waiting for a little breeze to be enlivened.
Definitely, I found my “Luminous Group” where giving and receiving nourishes us and makes us shine. Today I feel radiant and happy.
En Español
Hola amigos de Silver Bloggers hoy quiero compartirles una experiencia que acabo de tener y son de esas que te alegran el día, te llenan de motivación y que definitivamente te conmueven.
Esta mañana, un poco antes de las siete, llegué a una cancha cercana de mi casa para tener el tercer encuentro de Biodanza con un grupo de personas que han aceptado la invitación para tal fin. Les cuento un poco el contexto.
En el mes de junio comencé mi preparación como instructora de esta hermosa disciplina llamada biodanza, en este primer nivel, que dura seis meses, me exigen formar un grupo para ir avanzando en la formación.
Para tal fin, acondicioné un espacio en la casa e invité a mi esposo y a una hermana a practicar, aceptaron con agrado y sus participaciones me ha servido de mucho apoyo para organizar las clases, pero les cuento un secreto, ninguno de los dos sienten feeling por la actividad, la hacen por colaborar conmigo y se los agradezco, pero, la verdad, yo necesitaba algo más.
Así que pensé en llamar a unas amigas para que me acompañaran en mi formación, sin embargo, lo pensé mejor planteándome que posiblemente la situación se repite, vienen por apoyarme, pero no sentirán el gusto, placer y entusiasmo que produce la conexión con lo que hacemos. (Yo, poniéndome barreras, no, mentira).
Entonces me dije: ¡Amiga!, salga a buscar a la gente que quiera, esa “Gente Luminosa” como dice la canción que se llena de buena vibra y se entrega con cariño a ese presente que está viviendo.
En mi caminata diaria veo a un grupo de yoga unos días y otros a un grupo de baile, la muchacha que da las clases de bailoterapia, la conozco de vista, me le acerqué una de esas mañanas y le planteé que estaba buscando un grupo, que si podía, a través de ella, invitarlas a formarlo, le expliqué que la biodanza no representa competencia para ella, muy amablemente aceptó.
Me incorporé al grupo de bailoterapia, le hice el planteamiento, acordamos fecha y hora para el primer encuentro. Asistieron cuatro personas con las que inicié la actividad, el siguiente sábado, se unieron tres y hoy dos más.
Aquí es donde me detengo, una de las personas que llegó hoy es una encantadora señora de 92 años, con artrosis y usa bastón. Cuando la vi llegar pensé: Dios mío, ayúdame que no le pase nada y disfrute el rato.
Y así fue, escuchó la reflexión inicial de pie, apoyada en su bastón, cuando coloqué la primera pieza y todos comenzamos a danzar, ella se incorporó como con mucho cuidado, de pronto me entregó el bastón y se soltó dentro de sus posibilidades, estaba radiante, hizo la actividad completa, al despedirnos me agarraba las manos y me agradecía diciendo que tenía años que no bailaba y la pasaba tan divino.
Hoy el tema a tratar era profundizar en la potencia vital, esa con la que vamos diciendo con nuestro cuerpo y actitud amo y disfruto la vida, esta señora, Rebeca, es un ejemplo de esa llama viva que si la cultivamos está presente, no importa la edad ni muchas dolencias, a veces solo esperando una pequeña brisa para avivarse.
Definitivamente, encontré mi “Grupo Luminoso” donde el dar y recibir nos nutre y nos hace brillar. Hoy me siento radiante y feliz.
Translated with www.DeepL.com/Translator (free version)
Fuente de imágenes: Archivo personal
MIS REDES SOCIALES
Be Entrepreneur
Posted Using InLeo Alpha