Para mí el cierre de año es genial, es por eso que para ese día trato de relajarme y llevar las cosas con calma, en mi casa actualmente se hace un poco más emotivo estas fechas por la falta de familiares que se encuentran fuera del país, también aquellos que no se encuentran en este plano terrenal, pero aún así me gusta celebrar con cosas cómodas este gran dia. Mi día inicia en la cocina junto con mi mamá ya que nos gusta preparar pernil desde temprano en casa, muestras que vamos tomando y escuchando música, también para este día me gusta ubicar una hora exacta para la cena y que todos podamos disfrutar, el cierre de año de ha convertido en un día que para muchos es triste, porque su dolor así lo hace ver, pero aún en las tristeza siempre es bueno sonreír.

Desde siempre me ha gustado estar con la familia primero y luego irme con mis amigos, pero desde la muerte de quien era mi pareja las cosas cambiaron, además la edad también así lo pedía, la tranquilidad ante todo, después de su muerte dure algunos años que lo celebraba en el cementerio con familiares y amigos, después de un tiempo volví a retomar con mi familia está tradición, pero desde el nacimiento de mi hijo todo cambió totalmente, ahora el cierre de año lo hago lo mejor posible. El 31 a la medianoche me dispongo a tener todo preparado para el adiós del año, me gusta tener a mi hijo en brazos y que esté despierto, es el primero a quien le doy la bendición y le doy un beso gigante, luego a mi madre y padre, finalmente cierro con mi esposo ya que con ellos es quien recibo el año nuevo, luego pido a Dios por las cosas buenas que me trae el año nuevo y agradezco las cosas que sucedieron en el año viejo, me gusta orar junto a mi madre y dar la bienvenida al año nuevo, también elevamos oraciones antes de las 12 campanadas.