Por esta época del año nos llenamos de buenas intenciones, trabajamos en la proyección de deseos, sueños, metas, propósitos, activamos rituales y creencias de abundancia, prosperidad y en línea general, tenemos una disposición especial para realizar cambios positivos en nuestras vidas.
Aprovechar este impulso de energía positiva es importante para aquellos que creemos en los inicios, en los nuevos ciclos que se abren, en la renovación de la esperanza y la convicción de que podemos hacer mucho para ser y estar en mayor bienestar físico, mental y espiritual.
Por ello es oportuno crear las mejores condiciones para que los cambios que queremos florezcan y den sus frutos, en otras palabras acondicionemos el terreno donde queremos sembrar que no es otro que nuestro espacio interior, vamos a limpiarlo de malezas, aflojemos la tierra, sembremos la semilla, reguémosla con la luz de nuestros pensamientos y la coherencia con lo que, pensamos, decimos y hacemos.
Nuestra parcela interior es amplia o más bien infinita, podemos comenzar a limpiarla de malezas por el lado que prefiramos o que nos resulte más conveniente, lo que sí es sumamente importante es hacerlo con constancia, pues como sabemos hay malezas que hunden fuertemente sus raíces por lo que requieren de una energía extra para erradicarlas.
Aquí es donde llega la hora de soltar. Soltar lo que nos pesa, lo que nos maltrata, lo que nos duele, los rencores, resentimientos, miedos, inseguridades, apegos afectivos y materiales, pensamientos y actitudes que no se corresponden con lo que queremos y deseamos, en fin todo aquello que se convierte en un peso muerto que no nos permite avanzar, tomando en cuenta que si nos empeñamos en sembrar sin haber limpiado bien, es probable que los frutos no sean de muy buena calidad.
Por otra parte, seguro que has escuchado, en más de una oportunidad, que para que lleguen cosas nuevas a nuestra vida tenemos que abrir espacios, esta premisa es aplicable a todos los ámbitos de la vida, no solamente al closet para que nos llegue ropa nueva y es fácil de comprender cuando nos plateamos, por ejemplo, ¿´Cómo puedo estar en bienestar si me siento llena de inconformidad, resentimiento, críticas o pensando siempre en el peor escenario?
Siguiendo con la analogía de la parcela y la siembra, recordemos que cuando el suelo se satura de agua, su vía para volver al equilibrio es el desbordamiento y a su paso va arrastrando todo, sin ningún tipo de discriminación.
Aquí encontramos otro fundamento para soltar, todo lo que vas metiendo en tu mochila va aumentando el peso de la carga, acumular lo que no requerimos es el lenguaje claro de la carencia, el temor a no tener en el futuro, el lenguaje de la abundancia va, por otro lado: solo tengo y quiero aquello que requiero verdaderamente y no lo que surge de necesidades creadas.
Otra buena razón para soltar es que cuando lo hacemos nos sentimos liberados, aunado a esta gratificante sensación, el autoconcepto y la autoestima mejoran, nuestra fuerza interna crece al sabernos capaces de tomar decisiones, de decir que no a lo que nos perjudica o no requerimos y nos acercamos más al equilibrio y la coherencia aumentando nuestro bienestar.
Como posiblemente hayas vivenciado, soltar no se logra por decreto, tampoco es de un día para el otro, es un paso a paso en el cual vamos a avanzar hasta llegar a donde queremos. Una buena estrategia es no dejar el espacio vacío porque la maleza vuelve a crecer, a medida que vamos limpiando, sembremos, reguemos y cuidemos.
Hoy te invito a limpiar tu parcela soltando aquello que consideras que pesa y te detiene. Te dejo estas preguntas que pueden orientar tu reflexión.
¿Tienes buena disposición para comenzar el año soltando lo que no te ayuda y darle espacio a lo que sí quieres en tu vida?
¿Cuáles han sido tus estrategias para soltar?
¿Has obtenido resultados positivos?
Como siempre, recuerda seguir las normas de la comunidad para publicar: El post debe tener un mínimo de 500 palabras en un idioma (1.000 con la traducción), utiliza la etiqueta #soltar.
La iniciativa estará vigente desde hoy hasta el 2 de enero.
In English
At this time of the year we fill ourselves with good intentions, we work on the projection of desires, dreams, goals, purposes, we activate rituals and beliefs of abundance, prosperity and in general, we have a special disposition to make positive changes in our lives.
To take advantage of this momentum of positive energy is important for those of us who believe in beginnings, in new cycles that open, in the renewal of hope and the conviction that we can do much to be and be in greater physical, mental and spiritual well-being.
Therefore it is appropriate to create the best conditions for the changes we want to flourish and bear fruit, in other words, let us prepare the ground where we want to sow, which is none other than our inner space, let us clean it of weeds, loosen the soil, sow the seed, water it with the light of our thoughts and coherence with what we think, say and do.
Our inner plot is wide or rather infinite, we can begin to clean it of weeds on the side that we prefer or that is more convenient for us, what is extremely important is to do it with constancy, because as we know there are weeds that strongly sink their roots so they require extra energy to eradicate them.
This is when it is time to let go. Letting go of what weighs us down, what mistreats us, what hurts us, grudges, resentments, fears, insecurities, emotional and material attachments, thoughts and attitudes that do not correspond to what we want and desire, in short, everything that becomes a dead weight that does not allow us to move forward, taking into account that if we insist on sowing without having cleaned well, it is likely that the fruits will not be of very good quality.
On the other hand, surely you have heard, on more than one occasion, that for new things to come into our lives we have to open spaces, this premise is applicable to all areas of life, not just the closet to get new clothes and it is easy to understand when we ask ourselves, for example, 'How can I be in welfare if I feel full of dissatisfaction, resentment, criticism or always thinking about the worst case scenario?
Continuing with the analogy of the plot and the sowing, let us remember that when the soil is saturated with water, its way to return to equilibrium is to overflow and in its path it drags everything, without any type of discrimination.
Here we find another basis for letting go, everything you put in your backpack increases the weight of the load, accumulating what we do not need is the clear language of lack, the fear of not having in the future, the language of abundance goes the other way: I only have and want what I truly require and not what I do not need.
Another good reason to let go is that when we do it we feel liberated, together with this gratifying sensation, our self-concept and self-esteem improve, our internal strength grows knowing we are able to make decisions, to say no to what hurts us or what we do not need and we get closer to balance and coherence increasing our wellbeing.
As you may have experienced, letting go is not achieved by decree, neither is it from one day to the next, it is a step by step process in which we will advance until we get to where we want to be. A good strategy is not to leave the space empty because the weeds grow back as we clean, sow, water and take care of it.
Today we invite you to clean your plot by letting go of what you think is weighing you down and holding you back. I leave you these questions that can guide your reflection.
Are you ready to start the year letting go of what does not help you and give space to what you do want in your life?
What have been your strategies to let go?
Have you obtained positive results?
As always, remember to follow the community guidelines for posting: The post must have a minimum of 500 words in one language (1,000 with translation), use the hashtag #soltar.
The initiative will run from today until January 2
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Fuente de imágenes: Portada. Recursos canva - 1
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