Clarence, llegó a aquel poblado apartado de la nada, enviado desde la ciudad de Guayatal; aquel lugar se llamaba "La Paz", pero distaba mucho de ser un lugar donde imperara la tranquilidad, pues evidentemente lo que se había dado allí, dictaba de ser algo bueno, lo que había sucedido en esas tierras era un total misterio, tantas muertes, ningún sobreviviente y ni un solo cuerpo que atestiguara lo que había ocurrido en esas soledades. Solo se encontraron con lo que parecía ser el fósil de un animal, lobo, perro o algún animal parecido. Habían recorrido todas las pocas casas y todo estaba como si nada, como si sus ocupantes hubieran salido por un momento y que en cualquier momento vendrían a casa...

Pero lo último que se supo y le dieron información a Clarence en el expediente que le entregaron, era que estas personas, eran simples campesinos, que se dedicaban a la siembra, pero lo raro era que no tenían ningún tipo de animal a cargo, mucho menos mascotas; generalmente en estos poblados las personas criaban animales para su consumo o venta y siempre andaba algún perro, cuidando las casas y demás animales, era lo tradicional. Clarence, decidió acampar junto a sus 3 ayudantes, en el centro del pueblo, para esto prefirió hacerlo en una carpa traída, con ese propósito no quería "contaminar" la escena del crimen; esa primera noche todo transcurrió normal hasta las horas de la madrugada...

Como a eso de las 2:30 am empezaron a sentir, como si vinieran, personas caminando ruidosamente, junto con todo eso, lo que amerita, pisadas fuertes, personas hablando palabras ininteligibles o gimiendo, llantos de niños, gritos de madres y padres, como en desesperación, hasta se sentía ladridos de un perro, cosa curiosa. Clarence, fue el primero en despertar, luego los demás en un principio pensaron, que serían los habitantes del pueblo, quienes volvían de vuelta a sus casas, puesto que no se habían conseguido cuerpos, era factible. Así es que Clarence, abrió rápidamente la carpa para recibirles y tras de él, sus ayudantes, aún medio dormidos; se encontraron que solo había tenues sombras transparentes de personas, que emitían todo aquel alboroto; solo pudieron ver claramente a un hombre alto, vestido a la usanza de la región, con un gran sombrero que le cubría parcialmente el rostro acompañándolo, a su lado estaba un gran un perro-lobo con unos ojos que brillaban en la oscuridad como si fueran dos tizones rojos.

Clarence, al ver esta presencia tan nítidamente y observar a todas las demás presencias transparentes, se quedó atónito ante aquella visión, al igual que sus acompañantes. Este hombre se situó justo enfrente de ellos, allí pudieron ver claramente, que este tampoco, al igual que los demás, tampoco pisaba el piso, que flotaba levemente. El escalofrío y el miedo hizo presa de todos ellos, pero antes que pudieran reaccionar, este hombre les señalo una colina, que estaba justo al frente del pueblo y desapareció junto con todos los que le acompañaban. Clarence y sus amigos quedaron en el sitio, mudos de asombro, no pudieron dormir más, hasta que amaneció, saliendo los primeros rayos del sol, recogieron todo y se fueron a la colina señalada, algo debía estar en ese lugar, Clarence lo intuía, tenían que verlo con sus propios ojos, si su imaginación no les había jugado en contra.

Al llegar empezaron a revisar todo el terreno circundante, hasta que encontraron un zapatito semi enterrado, de allí en adelante empezaron a encontrar todos los cuerpos de los habitantes y junto a ellos unas botellas de un refresco muy popular llenas de un líquido viscoso color naranja, al lado de los cadáveres. Pronto se confirmó que todos habían sido envenenados por una familia del pueblo, que los habían dado en sacrificio a su Dios Mezcal, quien casualmente tenía figura de perro; por eso consiguieron el fósil de este animal como un tributo a lo que habían hecho y quienes habían hecho esto fueron los últimos en morir...

Lo supieron, porque fueron los únicos cadáveres que tenían una data de muerte más reciente y, por lo tanto, aún tenían, restos que pudieron ser estudiados más definidamente, no consiguieron rastros de este veneno en ellos, ni las botellas que los demás tenían a su lado; ahora como murieron ese es otro misterio... quizás aquel hombre del sombrero sepa también la respuesta; pero ya Clarence no lo quiso averiguar... el caso quedó cerrado como un envenenamiento colectivo, era la conclusión más normal que podían dar a las autoridades...

¡Hola queridos amigos! esta es mi participación en Hispaliterario 29/ La única evidencia, invito a mis amigas @popurri y @yole a participar, saludos!

Clarence arrived at that remote village out of nowhere, sent from the city of Guayatal; that place was called "La Paz", but it was far from being a place where tranquility prevailed, because evidently what had happened there, dictated to be something good, what had happened in those lands was a total mystery, so many deaths, no survivors and not a single body to testify what had happened in those solitudes. They only found what seemed to be the fossil of an animal, wolf, dog or some similar animal. They had gone through all the few houses and everything was as if nothing, as if their occupants had gone out for a moment and would come home at any moment....

But the last thing that was known, and Clarence was given information in the file that was given to him, was that these people were simple farmers, who were dedicated to planting, but the strange thing was that they did not have any type of animal in charge, much less pets; generally in these towns people raised animals for consumption or sale and there was always a dog, guarding the houses and other animals, it was the traditional thing to do. Clarence decided to camp with his 3 assistants in the center of the town, for this he preferred to do it in a tent he had brought with him, for this purpose he did not want to "contaminate" the scene of the crime; that first night everything went normally until the early hours of the morning...

At about 2:30 a.m. they began to feel, as if they were coming, people walking noisily, along with all that, which deserves, loud footsteps, people speaking unintelligible words or moaning, cries of children, cries of mothers and fathers, as if in desperation, even the barking of a dog could be heard, a curious thing. Clarence was the first to wake up, then the others at first thought that it would be the inhabitants of the village who were returning to their homes, since no bodies had been found, it was feasible. So Clarence quickly opened the tent to receive them and behind him, his assistants, still half asleep; they found that there were only faint transparent shadows of people, who emitted all that commotion; they could only clearly see a tall man, dressed in the style of the region, with a large hat that partially covered his face accompanying him, next to him was a large wolf-dog with eyes that glowed in the dark as if they were two red blights.

Clarence, seeing this presence so clearly and observing all the other transparent presences, was stunned by the sight, as were his companions. This man stood right in front of them, where they could clearly see that he, like the others, did not step on the floor, but floated lightly. The shiver and fear took hold of all of them, but before they could react, this man pointed to a hill, which was just in front of the town and disappeared along with all those who accompanied him. Clarence and his friends remained in the place, dumbfounded, they could not sleep anymore, until dawn, the first rays of the sun came out, they gathered everything and went to the indicated hill, something had to be in that place, Clarence sensed it, they had to see it with their own eyes, if their imagination had not played against them.

When they arrived they began to review all the surrounding land, until they found a half buried shoe, from then on they began to find all the bodies of the inhabitants and next to them some bottles of a very popular soft drink filled with a viscous orange liquid, next to the corpses. Soon it was confirmed that they had all been poisoned by a family of the town, who had given them in sacrifice to their God Mezcal, who happened to have a dog figure; that is why they got the fossil of this animal as a tribute to what they had done and those who had done this were the last to die....

They knew it, because they were the only corpses that had a more recent date of death and, therefore, they still had, remains that could be studied more definitely, they did not get traces of this poison in them, nor the bottles that the others had next to them; now how they died that is another mystery... maybe that man with the hat also knows the answer; but Clarence did not want to find out... the case was closed as a collective poisoning, it was the most normal conclusion that they could give to the authorities...

Hello dear friends! this is my participation in Hispaliterario 29/ The Only Evidence, I invite my friends @popurri and @yole to participate, greetings!