The Emperor's Wife || La Esposa Del Emperador (ENG/ESP)

Todos estaban emocionados de presenciar el matrimonio de su Emperador con una de las mujeres más hermosas que jamás habían visto en la tierra, Rachel. El Emperador había prometido ser un hombre diferente y un mejor líder para su pueblo desde el día en que conoció a Rachel.

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Había sido un mal líder y un malvado dictador para todo el Imperio, una muy buena razón para que la gente amara a su nueva esposa, quien todos creían que era la razón detrás de su cambio de opinión.

Rachel era una dama perfecta para cualquier hombre, ya que creció con su abuela, quien la crió para que fuera fuerte y muy cariñosa con las personas. Se había predicho que encontraría a su amor en el imperio, pero nunca supo que era el propio Emperador.

Rachel se sentía muy afortunada de casarse con él, pero algo seguía sintiéndose mal por ella, podía sentir que anhelaba más y no exactamente la vida que estaba viviendo como esposa del Emperador.

El Emperador hizo que todos los esclavos se hicieran cargo de las necesidades de Rachel, ella nunca tuvo que hacer nada aparte de cumplir con sus ritos matrimoniales en el dormitorio del Emperador y pasar tiempo con la naturaleza en el jardín del Palacio.

Rachel desarrolló una nueva pasión para quitarse el aburrimiento y eso fue cuidar las camas y las plantas, pasaba todos sus días en el jardín y todas sus noches en la habitación de su esposo, ambos casi no hablaban de sí mismos.

Rachel continuó manteniendo sus dolores porque pensó que ya se había inscrito en esa vida cuando aceptó casarse con el Emperador, no era como si tuviera la opción de rechazar su propuesta, excepto que quería perder a su abuela.

Como esposa de un Emperador que cambió su forma de ser, la gente la respetaba mucho y siempre la visitaba para hacerle regalos. Todos esperaban con ansias el día en que ella quedara embarazada y diera a luz a su próximo Emperador.

Aunque Rachel sentía que tener un hijo la ayudaría a tener días más divertidos en el Palacio, estaba tan segura de que no sería tan feliz como cuando se casara con la persona adecuada que la amaría y pasaría tiempo con ella a diferencia del Emperador. hizo.

Pero la idea de dejar el Palacio nunca pasó por su mente, ya que pensó que su abuela se merecía la buena vida que había tenido desde su matrimonio. Han sido dos años de fingir felicidad, Rachel conoció al nuevo mayordomo.

Frank, el nuevo mayordomo era tan guapo y joven que era la perfección a los ojos de Rachel. Ella comenzó a enamorarse de él cada vez que lo ve, especialmente en el comedor, nunca se pierde la comida del día solo porque quería verlo.

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Frank acababa de regresar de su ciudad natal para tomar el nombramiento de mayordomo en el Palacio, se sorprendió al ver que Rachel era la dama con la que se casó el Emperador. Él la había estado observando desde que eran niños y la había amado desde entonces, pero nunca llegó a decirle acerca de sus sentimientos.

Mientras Rachel estaba ocupada enamorada de él, Frank seguía deseando que le dieran solo un momento para ser el amor de su vida, aunque sabía que estaba muy mal. Frank se volvió más codicioso y se acercó a Rachel en sus aposentos.

Te conozco desde que éramos niños, pero sé que no me conoces, solo quería decirte que siempre te he amado.
Frank dijo luciendo tan sexy en su uniforme.

Rachel no pudo resistirse a él, finalmente lo vio de cerca y diciendo las palabras que tanto había anhelado escuchar de su esposo. Se arrojó sobre Frank e hicieron el amor entre ellos.

Ambos conversaron durante mucho tiempo y descubrieron que eran una pareja perfecta ya que podían sentir la química y el encanto entre ellos. Ambos sabían que estaban equivocados pero no podían dejar de verse y pasar tiempo juntos.

El Emperador estaba demasiado ocupado para notar algún cambio en su esposa, ya que ella también se aseguraba de verlo en su habitación todas las noches. Rachel se sintió más feliz en ese momento, teniendo un hombre que la amaba y la apreciaba, y un esposo que cubría todas sus necesidades.

Frank no ansiaba más que tener a Rachel para él solo durante el día cuando el Emperador está ocupado con otras cosas. Continuaron con su propia historia de amor oculta y ambos estaban bien con eso.

Ser la esposa del Emperador no significaba escapar de él hasta la muerte, Rachel pensó que podía mantener en secreto sus asuntos con el mayordomo hasta que ella muriera. No le importaba el futuro, solo quería ser feliz y Frank le estaba dando la felicidad.

Dos años más tarde, el Emperador murió y Rachel tuvo que elegir un nuevo esposo que los gobernaría. Confiaron en su juicio y ella eligió a Frank, quien estaba tan feliz de que finalmente fuera abierto con sus asuntos.

Se casaron y Rachel dio a luz a su hijo, que creció hasta ser tan guapo como su padre. Lo que Rachel nunca supo fue que Frank se volvió más codicioso y mató al Emperador para hacerse cargo.