RETORNANDO A MIS CAMINATAS

La vida es un continuo viaje que nos obliga a adaptarnos a los diversos escenarios que se presentan, y aunque en ocasiones nos sentimos con la energía al 100 y con la motivación suficiente para completar nuestro recorrido, notamos que a veces, llegan las curvas inesperadas y lo hacen cuando menos lo esperamos.

Me refiero a esos escenarios adversos, quizás las enfermedades llegan y nos sacuden, nos limitan, disminuyen la energía y la motivación rápidamente desaparece, de modo que ahora nos encontramos frente a un escenario diferente, sin energía, desanimados y si se quiere, desconectado de nuestro cuerpo.

En ese punto, vemos como el trabajo que hemos adelantados por gran parte de nuestras vidas parece no haber valido de nada, ya que en pocos días volvemos a encontrarnos a la deriva. Sin embargo, tenemos que aprender a tener tranquilidad y estar conscientes que cada día tiene su propio afán y que, a pesar de las circunstancias, siempre hay una luz al final del camino y lo increíble de todo, es que esa luz se hace cada vez más fuerte cuando volvemos a nuestra rutina y a nuestro estilo de vida.

Les comento lo anterior, porque así me sentí después de estar una semana y media en cama, productos de un proceso viral que me debilito de gran manera y en medio de mi proceso solo pensaba en lo que dejaba de hacer y en el tiempo que estaba perdiendo por estar tirado en una cama.

En medio de esta curva tan inesperada llamada enfermedad, pude entender que no somos capaces de controlarlo todo y solo esperaba ansiosamente el día en que pudiera volver al ruedo, sentir mis fuerzas y la energía necesaria en mis músculos para poder reiniciar mi recorrido.

En este sentido, el día a llegado y es aquí donde quiero compartir algunas pinceladas de ese contacto con la naturaleza en medio de mi recorrido al atardecer que me permite desconectarme de esa realidad que me agobia. En consecuencia, en esta primera caminata pude notar que mi cuerpo aun no responde como esperaba, la falta de aire aun es evidente, sin embargo, estoy determinado a adquirir y volver a mi rutina habitual, esa que me permite cuidarnos a nosotros mismos a través del ejercicio y como una forma de decirle a nuestro cuerpo que lo amamos y que la situación por la que estamos pasando es pasajera.

De modo que nuestra determinación es un acto de resistencia, y una advertencia a este viaje que definimos como vida, ya que le estamos diciendo “Vida como te pongas te vivo” lo que implica que somos más fuertes que las circunstancia, ya que estamos dispuestos a luchar por nuestra mejor versión, esa que nos hace sentir plenos y felices.

Ahora, un punto determinante en mi recuperación, es la intencionalidad, para poder lograr salir exitoso del proceso, ya que como mencione, debo comprender que aún no puedo volver a toda marcha y que necesito aprender a escuchar mi cuerpo, respetar sus límites actuales e ir avanzando a pasos lentos peros seguros.

Y tu ¿cómo afrontas tus procesos? Te invito a escribir de ello en Liketu, así podemos aprender mutuamente de nuestros @talentos.

Life is a continuous journey that forces us to adapt to the various scenarios that arise, and although sometimes we feel with 100 percent energy and with enough motivation to complete our journey, we notice that sometimes, unexpected curves come when we least expect them.

I am referring to those adverse scenarios, perhaps illnesses come and shake us, limit us, diminish energy and motivation quickly disappears, so that now we are facing a different scenario, without energy, discouraged and if you will, disconnected from our body.

At that point, we see how the work we have put in for most of our lives seems to have been for nothing, since in a few days we find ourselves adrift again. However, we must learn to have peace of mind and be aware that each day has its own eagerness and that, despite the circumstances, there is always a light at the end of the road and the amazing thing is that this light becomes stronger and stronger when we return to our routine and our lifestyle.

I am telling you the above, because that is how I felt after being in bed for a week and a half, products of a viral process that weakened me greatly and in the middle of my process I only thought about what I was missing and the time I was losing because I was lying in bed.

In the midst of this unexpected curve called illness, I could understand that we are not able to control everything and I was just waiting anxiously for the day when I could return to the arena, feel my strength and the necessary energy in my muscles to be able to restart my journey.

In this sense, the day has arrived and it is here where I want to share some brushstrokes of that contact with nature in the middle of my walk at sunset that allows me to disconnect from that reality that overwhelms me. Consequently, in this first walk I could notice that my body still does not respond as expected, the lack of air is still evident, however, I am determined to acquire and return to my usual routine, the one that allows me to take care of ourselves through exercise and as a way to tell our body that we love it and that the situation we are going through is temporary.

So our determination is an act of resistance, and a warning to this journey that we define as life, since we are saying "Life as you put it I live you" which implies that we are stronger than the circumstances, since we are willing to fight for our best version, the one that makes us feel full and happy.

Now, a determining point in my recovery is the intentionality, in order to be able to succeed in the process, since as I mentioned, I must understand that I still cannot go back to full speed and that I need to learn to listen to my body, respect its current limits and move forward slowly but surely.

And how do you face your processes? I invite you to write about it in Liketu, so we can learn from each other's @talents.