autor obra @saulos
Los enviaron a recoger leña, vivían en un lugar tranquilo y alejado, pero antes de salir su madre les dice, tengan cuidado no se dejen ver de las personas que de pronto encuentren en su camino.
Ellos como todo niño iban jugando y hablando de cosas, de repente de tanto saltar y jugar se le movió de su lugar a uno de ellos la cabeza, es cuando grita hermano ven ayúdame acomodarla. Si has pensado bien, su cabeza era esferas y se podían quitar y poner en su lugar, pero su madre les tenía prohibido hacerlo.
Por qué trataba de enseñarles que no es bueno tomar el lugar de otra persona en ningún aspecto, es cuando de repente a uno de ellos se le ocurrió y si cambiamos de cabeza solo por un rato nadie le dirá a mamá, digo es solo para saber lo que se siente exclamó uno de ellos, y así lo hicieron. Empezaron sin querer a experimentar lo que el otro tenía en sus pensamientos y en su cabeza y ya no era tan divertido, querían regresarla a su posición original y las cabezas esferas se han quedado trabadas.
Es cuando su madre al ver la demora salió a buscarlos y vio lo que habían hecho, se enojó mucho por la desobediencia, pero después de un rato y poder poner cada cabeza en su lugar, les dijo si ven que no es tan bueno querer tener lo que otros tienen ,ni opinar, ni juzgar es mejor trabajar y cultivar lo que se tiene por qué cuando nos damos cuenta de que no es lo que esperábamos, quizás habremos cruzado uno de tantos límites que no tienen reversa.
Una feliz navidad para todos los que llegaron hasta aquí y por leer con este relato me uno a participar en este concurso y aprovecho para invitar a todos los que lean y quieran participar son bienvenidos aqui nos vemos pues.