Fascinante la idea que nos da Encuentro de Talentos esta semana al recordarnos que:

Todos llegamos a este mundo desnudos, despojados de creencias y sin ninguna malicia.

lo puedes leer por acá:
Pies Descalzos

Recordarlo siempre, sobre todo cuando te maltratas a ti mismo por no tener esa ropa costosa, por no comprar a tus hijos ese juguete tan caro, y todas las veces que ves los estados de WhatsApp de otros que lograron ir de paseo a ese lugar que tú también quieres ir. Enmarca en el cuadro de tu vida tus prioridades y la verdadera felicidad.

Mi mente de inmediato se va a una de mis pasiones: cuidar, enseñar, proteger, escuchar a los niños, seres que poseen esa inocencia inicial que es un regalo para valorar y proteger. Inocencia que muchos adultos se encargan de cuestionar y devastar.

Para mí, al ver esa imagen de piecitos que vienen al mundo, inocentes, buscando las bendiciones de todos sus seres queridos en todos sus caminos, me lleva a un concepto de "Pies descalzos" que simboliza mi labor docente, mi intención de educar desde la calma, sin gritos, cultivando un ambiente donde los valores buscan y se enseñan con acciones. Aunque este pensamiento me llena de críticas externas, yo estoy con esos inocentes que necesitan hasta aprender a comer en paz, a respirar y, sobre todo, a pensar para su bienestar.

Desde la pandemia, ya estaba fuera de las aulas. Vino el pequeño Mathias y ya desistí de la idea de dar clases. Pero, para serles sincera, me cansé de escuchar que hay niños abusados, que llegaron con enésimos indicios de ello a las aulas de clases, y los maestros simplemente dijeron: "yo mejor no me meto en eso, porque luego salgo yo perjudicada".

Tema que simplemente dejaré por acá, y situación por la que decidí regresar y ser maestra. Y como dice mi cuñado, director de un colegio en Caracas, a veces se me va toda la mañana amarrando trenzas, abrazando y calmando situaciones que traen de casa, limpiando manos y boquitas, diciendo que no se habla con la boca llena de comida; pero estuve presente en sus vidas. No fui el maestro que abandonó en el peor momento de la historia.

Educar sin gritos, Comer y Respirar: Lecciones de Vida

Mis pequeños de este año, Primer grado.

Enseñar a comer y respirar puede parecer trivial, pero son actos fundamentales que a menudo pasamos por alto. Comer no solo se trata de satisfacer el hambre; es una oportunidad para conectarse con el cuerpo y la mente. En mis clases, invito a los estudiantes a ser conscientes de lo que comen, a entender la importancia de una alimentación balanceada y a disfrutar de cada bocado. Esto no solo promueve hábitos saludables, sino que también fomenta una relación positiva con la comida.

La respiración, por otro lado, es una herramienta poderosa.
A menudo, en medio de la agitación y el estrés, olvidamos la importancia de respirar profundamente. Enseñar a los estudiantes a respirar de manera consciente les ayuda a manejar sus emociones y a encontrar calma en momentos de tensión.

Al final del día, mi intención como docente no es impactar en la vida de nadie; mis pies descalzos son estar ahí como ellos, como niña y como niño, escuchar, acompañar, dar el abrazo. Y si tenemos tiempo, sumamos, restamos y escribimos, porque en casa todos están apurados con las redes sociales y atormentados con noticias, sin ver que el reloj está corriendo para los niños.

La imagen de portada está editada en canva, es de mi propiedad, Somos mi pequeño Mathias y Yo, acostados en una Hamaca. En la cual, mi bebe casi me obliga a descansar con él, al menos 2 horas en la tarde después de almuerzo. Ha sido una excelente terapia para mi.

Gracias por leerme

imágenes de mi propiedad, tomadas con mi Redmi 10A editadas en canva

English version

Fascinating is the idea that the Talent Meeting gives us this week by reminding us that:

We all come into this world naked, stripped of beliefs and without any malice.

you can read it here:

Bare Feet

Always remember it, especially when you beat yourself up for not having those expensive clothes, for not buying your children that expensive toy, and all the times you see the WhatsApp statuses of others who managed to go on a walk to that place that you also want to go. Frame your priorities and true happiness in the picture of your life.

My mind immediately goes to one of my passions: caring, teaching, protecting, listening to children, beings who possess that initial innocence that is a gift to value and protect. Innocence that many adults are responsible for questioning and devastating.

For me, seeing that image of little feet that come into the world, innocent, seeking the blessings of all their loved ones in all their paths, leads me to a concept of "Bare Feet" that symbolizes my teaching work, my intention to educate from calm, without shouting, cultivating an environment where values ​​are sought and taught with actions. Although this thought fills me with external criticism, I am with those innocent people who even need to learn to eat in peace, to breathe and, above all, to think for their well-being.

Little Mathias and his sister, being happy children. Mathi is almost four years old now.

Since the pandemic, he was already out of the classrooms. Little Mathias came and I already gave up the idea of ​​teaching. But, to be honest with you, I got tired of hearing that there are abused children, who arrived with umpteen signs of it in the classrooms, and the teachers simply said: "I better not get involved in that, because then I will be harmed."

A topic that I will simply leave here, and a situation that made me decide to return and be a teacher. And as my brother-in-law, director of a school in Caracas, says, sometimes I spend the whole morning tying braids, hugging and calming situations that come from home, cleaning hands and mouths, saying that you don't talk with your mouth full of food; but I was present in their lives. I was not the teacher who quit at the worst time in history.

Educate without shouting, Eat and Breathe: Life Lessons

Teaching how to eat and breathe may seem trivial, but they are fundamental acts that we often overlook. Eating is not just about satisfying hunger; It is an opportunity to connect with the body and mind. In my classes, I invite students to be aware of what they eat, to understand the importance of a balanced diet and to enjoy every bite. This not only promotes healthy habits, but also fosters a positive relationship with food.

Breathing, on the other hand, is a powerful tool.
Often, in the midst of turmoil and stress, we forget the importance of breathing deeply. Teaching students to breathe consciously helps them manage their emotions and find calm in moments of tension.

At the end of the day, my intention as a teacher is not to impact anyone's life; My bare feet are being there like them, as a girl and as a boy, listening, accompanying, giving the hug. And if we have time, we add, subtract and write, because at home everyone is in a hurry with social networks and tormented with news, without seeing that the clock is ticking for the children.

The cover image is edited in canva, it is my property, We are my little Mathias and I, lying in a Hammock. In which, my baby almost forces me to rest with him, at least 2 hours in the afternoon after lunch. It has been excellent therapy for me.

Thanks for reading me

Images of my property, taken with my Redmi 10A edited in canva