Una frase cargada de esperanza ¿Ilusoria o real? Para quienes viven el infierno, o solo la sombra del infierno.
Sombra y realidad de ver la ostentación y lujo grosero de la más pérfida canalla, comparados con los nazis. Asesinos capaces de torturar y asesinar a millones de seres humanos, bajo la premisa de que eran distintos, inferiores, de otra raza.
Los "Bestias" son capaces de similares crímenes, tal vez de algunos peores, más bajos en todo sentido moral, ellos no tienen la escusa de ser diferentes, ellos son capaces de perpetrar sus crímenes en sus hermanos, madres o hijos sin el menor reparo.
Codicia y resentimiento en saberse inferiores en todos los sentidos, salvo la barbarie y ferocidad bestial. Ninguno de los animales salvajes los iguala, salvo en el mundo microscópico, donde virus y bacterias se fagocitan sin distinción de parentescos. No los hay.
Una esperanza acunada en la posibilidad de la traición. La hipocresía y doble moral, solo capaz de algún leve juicio, al tiempo que bajo el velo del secreto saca jugoso beneficio del latrocinio y la inmundicia.
Cerdos togados y perros, más bien hienas de olivas uniformes escudados en las armas, carentes de honor y ley a diario,
someten a extorsión, humillación y vejamen a cuantos se cruzan en su camino.
A pesar de las más de dos décadas de infames triunfos del innoble régimen en complicidad de la rastrera y nefasta oposición, la esperanza no muere, como el Loto sagrado se eleva radiante sobre el pantano y a fin de cuentas se nutre del fondo putrefacto acumulado en el fondo.
La traición lleva en la frente escrito su destino. No disfrutará el precio de su vileza, si el remordimiento no cabe en su alma, peor será su final. El Hades encontrará justo castigo y su memoria borrada o acaso peor, un nombre sinónimo no de lo malo, sino de lo peor.
El sol no ha dejado de salir y a pesar de todo en el mausoleo no reposan los restos mortales del canalla. Noche a noche se revuelcan heridos de tantas maldiciones y sus herederos llevarán la vergüenza por generaciones.
¿Tres meses, tres años, tres décadas, siglos? - La conciencia tiene la respuesta.
ONLY THREE MONTHS LEFT!
A phrase full of hope Illusory or real? For those who live in hell, or just the shadow of hell.
Shadow and reality of seeing the ostentation and gross luxury of the most perfidious scoundrel, compared to the Nazis. Murderers capable of torturing and murdering millions of human beings, under the premise that they were different, inferior, of another race.
The "Beasts" are capable of similar crimes, perhaps some worse, lower in every moral sense, they have no excuse for being different, they are capable of perpetrating their crimes on their brothers, mothers or children without the slightest objection. .
Greed and resentment in knowing that they are inferior in every way, except for barbarism and bestial ferocity. None of the wild animals equals them, except in the microscopic world, where viruses and bacteria are engulfed without distinction of kinship. There are none.
A hope cradled in the possibility of betrayal. Hypocrisy and double standards, only capable of some mild judgment, while under the veil of secrecy it makes a juicy profit from robbery and filth.
Robed pigs and dogs, more like hyenas in olive uniforms shielded in arms, devoid of honor and law daily,
they subject all who cross their path to extortion, humiliation and humiliation.
Despite more than two decades of infamous victories of the ignoble regime in complicity with the creeping and disastrous opposition, hope does not die, like the sacred Lotus rises radiantly over the swamp and ultimately feeds on the rotten bottom accumulated in the bottom.
Betrayal has its destiny written on its forehead. He will not enjoy the price of his vileness, if remorse does not fit in his soul, the worse his end will be. Hades will find just punishment and his memory erased from him or perhaps worse, a name synonymous not with the bad, but with the worst.
The sun has not stopped rising and despite everything the mortal remains of the scoundrel do not rest in the mausoleum. Night after night they wallow wounded by so many curses and their heirs will bear the shame for generations.