Greetings to everyone in this great Wednesday Walk community!
There is nothing more pleasant and revitalizing than being by the sea. I have written about it in many posts lately, but it is impossible to resist its charm. I live on an island and the sea is part of my identity, it is an obligatory landscape for all Cubans, although not all of us live near it. However, I dare to say with complete certainty that there is no Cuban who does not know the pleasant sensation of being next to this great blue that extends beyond our sight.
This was a girls' outing, one afternoon in the company of my little girl and my sister. We went to Club Havana, a place located in the municipality of Playa, in the Jaimanitas district. A very cosy facility next to the coast that also has a swimming pool, cafeteria, bar, among other services, designed to make the day as pleasant as possible. The three of us had a great time together, we laughed, we chatted (my sister and I gossiped 😇), we had lunch, we enjoyed some time by the sea.
It was an afternoon to relax and have fun, especially for my little girl, who had a lot of fun building a sand castle, a "castle" in her own way, of course. On this day we didn't wear swimming costumes, so we could only dip our feet in the sea water. Although the day was not ideal for swimming on the beach because it was cloudy.
In the morning, the day was sunny, but sometimes at this time of year it tends to get cloudy and rainy after midday, so the sea was not as deep blue as it usually is. However, it was a relief to see the sun hide, as even though it is October, the heat is still quite intense.
The beach strip was very well equipped, with plenty of palm trees and umbrellas to protect you from the sun, as well as sun loungers and water bikes. Although there were few people enjoying the water that day, I felt like taking a dip. Although I live surrounded by the sea, I rarely go to the beach, which reminds me of a saying that you don't always value what you have jaja, so I think I should enjoy the beach more.
Being by the sea changed our mood. My little girl was very happy, and wanted to take off her shoes to feel the water on her feet, I could not deny her that pleasure, although the sea water was a bit cold, because of the cloudy day.
The sea is beautiful when the day is sunny, when it shines in the sunlight it offers a beautiful spectacle. I can't deny that a sunrise or sunset by the sea is beautiful, but personally I am especially drawn to cloudy, sunless days with grey skies. I am captivated by the sense of mystery that such days have and the grayish blue and silver tone that the sea reflects. Everything takes on a calmer appearance, and there is a sense of calm in the surroundings. In general, I enjoy cloudy and rainy days, even if I'm not by the sea. I guess it's because we are almost always under the influence of bright sunny days, and as I said, sometimes we need a bit of what we don't have.
I think I should do these walks more often (I wish I could always). I left here very relaxed, it is true that the sea is a good therapy against stress.
I hope you enjoyed my walk today. I say goodbye, see you next Wednesday!👋
*¡Un Saludos a todos en esta genial comunidad de Paseo de Miercoles!
No hay nada más agradable y revitalizador que estar junto al mar. Últimamente he escrito en muchas publicaciones sobre él, pero es imposible resistirse a su encanto. Vivo en una isla y el mar forma parte de mi identidad, es un paisaje obligado para todos los cubanos, aunque no todos vivimos cerca de él. Sin embargo, me atrevo a decir con total seguridad que no hay cubano que no conozca la agradable sensación de estar junto a este gran azul que se extiende más allá de donde alcanza nuestra vista.*
Este fue un paseo de chicas, una tarde en compañía de mi niña y mi hermana. Nos fuimos hasta el Club Habana, un lugar que se encuentra en el Municipio Playa, en el reparto de Jaimanitas. Una instalación muy acogedora junto a la costa que cuenta además con piscina, cafetería, bar, entre otros servicios, diseñados para pasar el día lo más agradable posible. Lo pasamos muy bien las tres juntas, nos reímos, charlamos ( mi hermana y yo, chismeamos ) almorzamos, disfrutamos un rato junto al mar.
Fue una tarde para relajarnos y divertirnos, sobre todo para mi niña, que se entretuvo mucho construyendo un castillo de arena, un "castillo" a su manera, claro . Este día no llevábamos traje de baño, así que solo nos pudimos mojar los pies en el agua del mar. Aunque el día no estaba ideal para bañarse en la playa porque estaba nublado.
Por la mañana, el día estaba soleado, pero a veces en esta época del año suele nublarse y llover después del mediodía, por lo que el mar no lucía ese intenso color azul que suele tener. Sin embargo, fue un alivio que el sol se ocultara, ya que a pesar de que estamos en el mes de octubre, el calor es bastante intenso.
La franja de playa estaba muy bien acondicionada, con muchas palmeras y sombrillas para protegerse del sol, así como tumbonas para descansar y bicicletas acuáticas. Aunque ese día había pocas personas disfrutando del agua me dieron ganas de darme un chapuzón. Aunque vivo rodeada de mar, voy muy poco a la playa, lo cual me recuerda un refrán que dice que uno no siempre valora lo que tiene jaja, así que creo que debería disfrutar más de la playa.
Estar junto al mar nos cambió el estado de ánimo. Mi niña estaba muy alegre, y quiso quitarse los zapatos para sentir el agua en sus pies, no pude negarle ese placer, aunque el agua de mar estaba un poco fría, por lo nublado del día.
El mar es precioso cuando el día está soleado, cuando brilla bajo la luz del sol ofrece un bello espectáculo. No puedo negar que un amanecer o un atardecer junto al mar es hermoso, pero personalmente me siento especialmente atraída por los días nublados, sin sol y con el cielo gris. Me cautiva esa sensación de misterio que tienen los días asi y el tono azul grisáceo y plateado que refleja el mar. Todo toma una apariencia más tranquila, y se siente calma en los alrededores. En general, disfruto de los días nublados y lluviosos, aunque no esté junto al mar. Imagino que se debe a que casi siempre estamos bajo la influencia de días soleados y brillantes, y como ya dije, a veces necesitamos un poco de lo que no tenemos.
Creo que debería hacer estos paseos más a menudo (ojala siempre pudiera). Salí de aquí muy relajada, es cierto que el mar es una buena terapia contra el estrés.
Espero que hayan disfrutado de mi paseo de hoy. Me despido, ¡hasta el próximo miércoles!👋
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