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[ESP/ENG] Un cuento de horror en #lacasitahive / A tale of horror in #lacasitahive
Hace calor, este verano ha sido de los más calurosos de mi vida, y en la parte oriental de Venezuela siempre hace calor, pero nunca como ahora, esta temporada ha superado a cualquier otra que recuerde, de pronto comienza a llover y el calor arrecia más, parece una contradicción, pero no lo es.
Desde aquellos terribles acontecimientos del año pasado, no he podido dormir bien, durante el día es imposible con este calor sofocante y en las noches, bueno durante las noches, ni siquiera intento hacerlo, me limito a jugar con un viejo revolver que heredé de mi abuelo, con la esperanza de conseguir la fuerza para acabar con esta miserable existencia en un segundo, pero no tengo el valor.
Cada noche es lo mismo, me siento rebasado por este terror incontrolable, esa nictofobia de la infancia que creí superada estaba de vuelta, solo que ahora, en proporciones bíblicas, ya no sé qué pensar, en principio supuse que abandonando aquella vieja casona en el casco histórico de Cumaná dejaría atrás toda esta pesadilla que me ha venido atormentando por los últimos meses, pero no fue así, al contrario, creo que no solo me siguió hasta acá, sino que se juntó con la carga espiritual de la nueva casa y se multiplicaron los episodios de terror.
Anoche mientras trataba de dormir, sentí la imperiosa necesidad de comer algo dulce, observaba la puerta de mi cuarto y solo alcanzaba a distinguir las sombras que se movían debajo de la puerta, el terror me invadía, primero traté de ignorarlas, luego pensé en cubrirme con una cobija, pero con este calor seguro moriría asfixiado en unos minutos, además aún no desempaco casi nada desde la mudanza, y sabrá Dios donde quedarían las cobijas, y producto del calor, desde hace mucho tiempo no las uso, aparte de las sabanas y el cubrecamas lo demás ya no fue necesario.
Me resigné a no salir de la cama, decidí limitarme a contemplar el techo y dormitar como todas las noches, cuando repentinamente un destello al fallar la electricidad, (en Venezuela esto ocurre casi a diario), de pronto quedé sumergido en las tinieblas, recordé que aún no conocía bien esta casa, por lo que sería muy difícil desplazarme en la oscuridad, solo pude distinguir algo de luz en los bordes de la puerta, en eso una vocecilla a lo lejos me sacó de mi línea de pensamientos, mientras dejaba escapar una palabra: "Papá".
No me asusté, respiré profundamente, me levanté de la cama y me dispuse a salir del cuarto, ahora en la más absoluta oscuridad, Busqué en vano una linterna o una vela, (Recordé que desde la mudanza no había previsto algo así, por lo que no había comprado ninguna de las dos) así que tragué saliva, abrí la puerta y salí.
Inmediatamente, pude sentir detrás de mí una gran energía espiritual dentro del cuarto que dejaba atrás, rápidamente cerré la puerta y me dirigí al refrigerador, (siempre si iba a buscar ese bocadillo que necesitaba), estuve caminando hacia la cocina por un buen rato antes de darme cuenta de que esa casa no era tan grande, una brisa fría me golpeó en el rostro y un terrible escalofrío recorrió todo mi cuerpo, me detuve petrificado en medio de la más terrible oscuridad, traté de distinguir algo a mi alrededor, pero fue en vano, estaba perdido en medio de mi propia casa, sentía que mis pies estaban clavados al piso, y con profundo terror me di cuenta de que estaba en la vieja casona del casco histórico de Cumaná, mis pies no me obedecían y solo sentía esa gran carga espiritual detrás de mí, que me obligaba a avanzar hacia lo desconocido.
Luego de un rato en la oscuridad absoluta, comencé a distinguir algunas cosas, una puerta, y un pasillo de paredes escarchadas que conocía bien, comencé a pensar que era solo una pesadilla de la que no podía despertarme, horrorizado y sin saber qué hacer seguí caminando por el pasillo que estaba delante de mí.
FuenteAl final de este pasillo, a lo lejos, se distinguía una gran puerta de madera, yo seguía sintiendo detrás de mí, una inmensa carga espiritual que turbaba mis sentidos y no me dejaba razonar bien, así que solo me enfoqué en avanzar sin saber bien hacia donde me conducía la ruta que llevaban mis pies en medio de aquella terrible incertidumbre y oscuridad.
De pronto, a lo lejos, pude ver una figura espectral, una pequeña niña que me señalaba hacia adelante mientras cruzaba la puerta, de manera automata me acerqué, ya no podía estar más aterrorizado, así que solo me dejé llevar y fui detrás de ella.
Al cruzar aquella puerta me encontré en medio de un bosque luminoso y fantástico; sin embargo, en esas circunstancias no tenía tiempo de admirar el paisaje, me fui detrás de aquella niña que, mientras más me acercaba, más sentía como la sangre se me helaba en las venas, al mismo tiempo pude ver, cada vez de forma más clara, quien podía ser esa pequeña niña, al cabo de unos segundos que parecieron eternos, pude reconocerla, ese vestido, ese tocado en los cabellos, el mismo velo con el que la sepultamos, era la imagen que no me permitía dormir durante las noches, desde su repentina muerte en la vieja casona, era mi pequeña hija.
En medio de toda esta cadena de eventos ya no tuve miedo, me resigné y solo pensé en seguirla, en verla de nuevo al rostro y pedirle perdón por aquel suceso en el que le quité la vida con el viejo revolver del abuelo de forma accidental, durante aquella terrible noche de verano, así que solo crucé la puerta y la seguí.
Nos adentramos en aquel bosque que, de alguna manera, apareció en medio de la casa, era un sitio realmente mágico, a pesar de no poder ver casi nada producto de su luminiscencia, sentí la presencia de todo tipo de espectros y seres que no pertenecen a nuestro mundo, mientras escuchaba los gritos y susurros más terribles que alguien pudiera imaginar.
así anduvimos por un tiempo que no podría definir, hasta una gran puerta, detrás de esta todo era luz, era como el final de aquella terrible noche, sentí que al cruzarla podría despertar, podría salir de aquella espantosa pesadilla.
La niña me condujo hasta la puerta, yo traté de hablarle en vano, traté de verla a su rostro para pedirle perdón, y mil veces perdón, pero no me fue posible, era como si una fuerza superior me impidiera hablarle, que no me dejara verle a los ojos.
Crucé la puerta y me encontré nuevamente en la oscuridad de mi cuarto, parecía que había despertado de aquella pesadilla, abrumado, confundido, respiré aliviado, hasta que caí en cuenta que no era así, mientras trataba de entender como pasé de la oscuridad a la luz, y de esta nuevamente a la oscuridad, comprendí que no era cierto, que no estaba despierto, lentamente me fui acostumbrando a la penumbra, hasta que justo en medio del cuarto pude ver mi cuerpo recostado en la cama, con la más terrible expresión de terror en el rostro, en mi mano el viejo revolver, mientras la pequeña me conducía nuevamente hacia aquella puerta de luz y su voz, la dulce voz de mi niña que me repetía: "Papá, papá".
El contenido de esta publicación es de mi absoluta autoría, producto de la creación de contenido original, exclusiva para el ecosistema #hive.
It's hot, this summer has been one of the hottest in my life, and in the eastern part of Venezuela it's always hot, but never like now, this season has surpassed any other I can remember, suddenly it starts to rain and the heat gets hotter, it seems like a contradiction, but it's not.
Since those terrible events of last year, I have not been able to sleep well, during the day it is impossible in this suffocating heat and at night, well during the nights, I don't even try, I just play with an old revolver that I inherited from my grandfather, hoping to get the strength to end this miserable existence in a second, but I don't have the courage.
Every night it's the same, I feel overwhelmed by this uncontrollable terror, that childhood nyctophobia that I thought I had overcome is back, only now, in biblical proportions, I don't know what to think, At first I assumed that by leaving that old house in the historic centre of Cumaná I would leave behind all this nightmare that has been tormenting me for the last few months, but it wasn't like that, on the contrary, I think that not only did it follow me here, but it joined the spiritual burden of the new house and the episodes of terror multiplied.
Last night while I was trying to sleep, I felt the imperious need to eat something sweet, I looked at the door of my room and I could only distinguish the shadows that moved under the door, terror invaded me, first I tried to ignore them, then I thought of covering myself with a blanket, but with this heat I would surely die suffocating in a few minutes, but with this heat I would surely die suffocating in a few minutes, besides I still haven't unpacked almost anything since the move, and God knows where the blankets would be, and due to the heat, I haven't used blankets for a long time, apart from the sheets and the bedspread, the rest was no longer necessary.
I resigned myself to not getting out of bed, I decided to limit myself to contemplate the ceiling and doze off like every night, when suddenly a flash when the electricity failed, (in Venezuela this happens almost daily), suddenly I was submerged in darkness, I remembered that I still did not know this house well, so it would be very difficult to move in the dark, I could only distinguish some light on the edges of the door, at that a little voice in the distance pulled me out of my line of thought, while I let out a word: "Dad".
I didn't panic, I took a deep breath, got out of bed and prepared to leave the room, now in absolute darkness, I searched in vain for a torch or a candle, (I remembered that since the move I hadn't foreseen such a thing, so I hadn't bought either) so I swallowed hard, opened the door and went out.
Immediately, I could feel behind me a great spiritual energy inside the room I was leaving behind, I quickly closed the door and went to the refrigerator, (always if I was going to look for that snack I needed), I was walking towards the kitchen for quite a while before I realized that this house was not so big, a cold breeze hit me in the face and a terrible shiver ran through my whole body, I stopped petrified in the middle of the most terrible darkness, I tried to distinguish something around me, but it was in vain, I was lost in the middle of my own house, I felt that my feet were nailed to the floor, and with deep terror I realised that I was in the old house of the historical centre of Cumaná, my feet did not obey me and I only felt that great spiritual burden behind me, which forced me to advance towards the unknown.
After a while in absolute darkness, I began to make out some things, a door, and a corridor with frosted walls that I knew well, I began to think that it was just a nightmare from which I could not wake up, horrified and not knowing what to do, I continued walking down the corridor in front of me.
FuenteAt the end of this corridor, in the distance, a large wooden door could be distinguished, I continued to feel behind me, an immense spiritual burden that troubled my senses and did not let me reason well, so I just focused on moving forward without knowing where the route that my feet were leading me in the midst of that terrible uncertainty and darkness.
Suddenly, in the distance, I could see a spectral figure, a little girl pointing ahead of me as I walked through the door, I automatically approached her, I couldn't be more terrified, so I just let myself go and went after her.
When I crossed that door I found myself in the middle of a luminous and fantastic forest; However, in those circumstances I had no time to admire the landscape, I went after that little girl who, the closer I got, the more I felt my blood run cold in my veins, at the same time I could see, more and more clearly, who that little girl could be, after a few seconds that seemed eternal, I could recognise her, that dress, that headdress in her hair, the same veil with which we buried her, she was the image that kept me awake at night, since her sudden death in the old house, she was my little daughter.
In the midst of all this chain of events I was no longer afraid, I resigned myself and thought only of following her, of seeing her face again and asking her forgiveness for that event in which I accidentally took her life with an old revolver of grandfather's, during that terrible summer night, so I just walked through the door and followed her.
We went into that forest that somehow appeared in the middle of the house, it was a truly magical place, even though I could see almost nothing because of its luminescence, I felt the presence of all kinds of spectres and beings that do not belong to our world, while I heard the most terrible screams and whispers that anyone could imagine.
So we walked for a time that I could not define, until a large door, behind it all was light, it was like the end of that terrible night, I felt that by crossing it I could wake up, I could get out of that dreadful nightmare.
The girl led me to the door, I tried to speak to her in vain, I tried to see her face to ask her forgiveness, and a thousand times forgiveness, but it was not possible, it was as if a superior force prevented me from speaking to her, that would not let me see her eyes.
I crossed the door and suddenly I found myself again in the darkness of my room, it seemed that I had woken up from that nightmare, overwhelmed, confused, I breathed relieved, until I realized that it was not so, while I tried to understand how I passed from the darkness to the light, and from this one again to the darkness, I understood that it was not true, I slowly got used to the gloom, until right in the middle of the room I could see my body lying on the bed, with the most terrible expression of terror on my face, in my hand the old revolver, while the little girl was leading me again towards that door of light and her voice, the sweet voice of my little girl repeating to me: "Daddy daddy".
The content of this post is entirely my own, the product of original content creation, exclusive to the #hive ecosystem.
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