La fractura del alma.
En una noche fría, rompiste el silencio, tu mirada más fría que la misma noche, tus palabras lapidarias salían una otra otra como si estás vinieran tomadas de la mano.
–”Mi corazón dice que mientes”–
Aquella frase fui igual a recibir un disparo a quemarropa; estabas sentado con la mirada hacia el piso, quizás buscando palabras, iguales a las anteriores, palabras que eran balas qué llegaban inminentes.
Me quedé helada, petrificada al igual que una estatua de mármol, los ojos vidriosos querían explotar en lágrimas y el corazón lentamente se apagó, apenas latía.
Seguí mirándote y en un arranque de valor absurdo y tragando la sal de esas lágrimas que estaban detenidas te hable fuerte, así impedía que notarás cómo caían mis pedazos al piso que tu tanto veías.
–¿Por qué estar conmigo?– pregunté temblando a su respuesta, las piernas casi deshechas, parecían un par de hilos, de esos de colores que están en el canasto de costura, también sentía las agujas clavarse en mi cuerpo cuando alzaste por fin la mirada.
Tus ojos marrones, esos que me veían lindo, no mostraban nada, un suspiro detonante a tu seguidilla de palabras, parecía un discurso de ira reprimida.
Ahí seguía frente a quien decía amarme, a quien me abrazaba esporádicamente, y es que fui tan ciega qué no veía que el amor de antes se había ido.
No tuvo piedad alguna y una tras otras si palabras de liberación llegaban de forma destructiva, no había compasión, nunca hubo confianza, cada cosa que realizaba para él era una mentira, una relación falsa en la que caí como una idiota enamorada.
Se quedó en silencio, sus palabras hirientes al parecer se terminaron, el discurso creado en su mente aniquiladora dejaron de salir de su boca.
Una guerra sin sentido, en un cuartel disfrazado, una rehén por gusto propio en una relación de papel, de esas que se acaban cuando cae la lluvia y lo termina mojando todo.
Seguí mirando su frialdad, me observó buscando quizás un disculpa, buscó un perdón a un error que no fue mío. Mis ojos tristes, desolados y de pronto nada, ya no había nada.
Me acosté en silencio, acomodé mi almohada, a mi lado el hombre que me mató con sus palabras, miró al techo buscando quizás un agujero y que así no alma escape por fin de este destruido cuerpo.
La noche se ha vuelto eterna y las alas con las que vez imaginé volaba, se rompieron con tus palabras. Allí estamos, uno frente al otro, tus ojos vacíos llenos de rencor y los míos opacos por en gran dolor.
En esta noche se acabó el amor, se acabó por nada, se acabó sin razón, al final la culpa siempre fue mía, así lo haces siempre sentir, soy la mala de una historia mal contada, soy la villana de una historia de amor, de una donde hacía todo y tu no hacías nada y al final de cuentas me preguntó entonces ¿de qué sirvió?
English
The fracture of the soul.
On a cold night, you broke the silence, your gaze colder than the night itself, your lapidary words came out one another as if they came hand in hand.
-My heart says you're lying.–
That sentence was like being shot at point-blank range; you were sitting with your eyes on the floor, perhaps looking for words, just like the previous ones, words that were bullets coming imminently.
I froze, petrified like a marble statue, my glassy eyes wanted to burst into tears and my heart slowly went out, barely beating.
I kept looking at you and in a burst of absurd courage and swallowing the salt of those tears that were stopped, I spoke to you loudly, so you would not notice how my pieces fell to the floor that you saw so much.
-Why be with me?" I asked trembling at your answer, my legs almost undone, they looked like a pair of threads, of those colored ones that are in the sewing basket, I also felt the needles digging into my body when you finally looked up.
Your brown eyes, those that made me look pretty, showed nothing, a triggering sigh to your string of words, it seemed like a speech of repressed anger.
There I was still in front of the one who said he loved me, the one who hugged me sporadically, and I was so blind that I didn't see that the love from before was gone.
He had no mercy and one after another if words of liberation came in a destructive way, there was no compassion, there was never any trust, everything I did for him was a lie, a false relationship in which I fell like an idiot in love.
He was silent, his hurtful words apparently ended, the speech created in his annihilating mind stopped coming out of his mouth.
A senseless war, in a disguised barracks, a hostage for her own pleasure in a paper relationship, one of those that end when the rain falls and ends up wetting everything.
I kept looking at her coldness, she watched me looking for an apology, she looked for a forgiveness for a mistake that was not mine. My eyes sad, desolate and suddenly nothing, there was nothing.
I lay down in silence, I arranged my pillow, next to me the man who killed me with his words, looked at the ceiling looking for a hole so that no soul could escape from this destroyed body.
The night has become eternal and the wings with which I once imagined I was flying, broke with your words. There we are, facing each other, your empty eyes full of rancor and mine opaque in great pain.
On this night love ended, it ended for nothing, it ended for no reason, in the end it was always my fault, that's how you always make me feel, I'm the bad guy in a badly told story, I'm the villain in a love story, one where I did everything and you did nothing and at the end of the day I asked myself then what was the point?
@soloescribe nos lleva a su concurso #14 donde nos inspiraremos en la frase El principio del final, finales qué llegan a dar nuevos comienzos, a cortar cadenas y claro está, a avanzar luego de la tormenta.
@soloescribe takes us to his contest #14 where we will be inspired by the phrase The beginning of the end, endings that come to give new beginnings, to cut chains and of course, to move forward after the storm.