El tiempo pasaba y cada vez se acercaban los recuerdos; esos recuerdos que muchas veces frecuentan en mi corazón y en mi mente solitaria. Intento enfrentarme a ellos, pero son difíciles de a veces de soportar al tal grado de hacerme apartarme de mi misma y continuar en un camino en donde solo Dios sabe estoy yendo. Cada vez las hojas se hacen más verdes pero en un tono oscuro a medida que continuaba con mi camino, sigue pasando el tiempo como si brincáramos en un país tras otro, mi mente se esta nublando por mis sentimientos negativos.
Intento ser feliz bajo a estas circunstancias sentimentales; quiero liberarme de las malas emociones, pero una parte de mi acepta que esté conmigo; estas sensaciones y negatividades internas de mi, los recuerdos son cada vez más fuerte sin dejarme la posibilidad de que disfrute de alguna manera la nostalgia que sentía en estos recuerdos. Al llegar un camino final; veo que todo para mi se ha nublado en un mar de oscuridad y de tristeza, pero a la vez haciéndome sentir bien como si adaptada estuviese desde hace muchos años. A pesar de que nadie ha comprendido mis sentimientos siento que esto es lo mejor que tengo para entenderme a mi misma, ya que nadie lo ha hecho por mi.
Me moldeo y me dejo llevar ante estas emociones; nadie me guía y continúo sola bajo en estas nubes con poca sol; mi mente y corazón se interconectan cada momento; cada instante a medida que paso el tiempo observando a mis alrededores. Quisiera que estuvieran aquí; aquellos que estuvieran aquí para que vieran lo que siento y que quiero expresar, pero ni ellos mismos pueden hacerlo por lo que estar sola me es más conveniente para mi ante mis sentimientos.
Es cierto, ellos me han abandonado y solo quedaron los buenos momentos en mis recuerdos, pero al final no los puedo disfrutar como es debido, ya que la nostalgia no esta en mi y me hace sentir muy mal por lo que me hace huir de aquellos recuerdos he intentar rescatar de lo bueno que quedó en ellos porque no hay más nadie quien pueda reemplazar estas cosas. Intento ser libre ante ello, pero hay algo que no me deja, como si no estuviese preparada para enfrentar esa realidad; esa triste realidad de que ellos, ya no están conmigo acompañándome...
