Si hay producciones audiovisuales que logran captar la atención, al menos en lo que a mi respecta, son las que involucran una investigación criminal, juicio y recopilación de pruebas... si a eso le añadimos que se base en un hecho de la vida real y del pasado muy reciente, pues la expectación aumenta.
Primero, relatemos los hechos (reales)
En mayo del 2017 fue hallado calcinado dentro de un automóvil, un cadáver, en un pantano en las afueras de la ciudad de Barcelona, en España. Tenía pareja, era guardia civil y un hijo de su primer matrimonio. Su novia, Rosa Peral, con quien vivía y las hijas de éstas fue investigada y mediante contradicciones en los testimonios se la encontró culpable junto con su amante Albert López de asesinato.
La serie
Netflix nos trae un relato sobre la muerte de un agente de la guardia urbana en Catalunya, España, basándose en los acontecimientos que fueron relatados en el juicio que posteriormente se llevó a cabo, hay que destacar la maravillosa actuación de Úrsula Corberó como la protagonista que da vida a una mujer cuya psicología y motivaciones queda un poco en la penumbra, porque la serie no muestra introspecciones de los personajes, sino hechos, que podrían llamarse objetivos.
Rosa, es una mujer que se apuntó a la guardia urbana y obtuvo un puesto dentro del cuerpo, tenía una pareja formal y a su vez sostenía relaciones íntimas con un superior dentro del mencionado cuerpo. Cuando dió por terminada la relación adúltera, desde su propio correo fue enviada a cada contacto fotos sexuales de ella teniendo intimidad con otro u otros hombres que no fueron visibles en las imágenes. Ella asegura que se trató de una venganza de su amante, sin embargo ese hecho causó la ruptura de su relación y ante la falta de apoyo de sus compañeros, decidió trasladarse a otro cuerpo en otra zona. Allí inició al cabo de un tiempo una relación íntima con otro compañero que sostuvo hasta luego de haberse reconciliado con su ex pareja, haber contraído matrimonio y haber tenido una hija. A la postre, esa relación adúltera sería la causa de su posterior divorcio.
Inició una relación con Pedro Rodríguez quien luego de 8 meses de convivencia y aparentes situaciones de altibajos muere en extrañas circunstancias. No se sabe cómo murió, quién planificó el asesinato, quién lo ejecutó. Rosa, de forma inexplicable, porque era policía, conservó evidencia que aunque por inferencia la señalaba. Cuando se vió acorralada, culpó a su amante Albert y éste respondió con acusaciones similares que señalaban a la mujer como la asesina. La fiscalía implantó la hipótesis de que fue un hecho planificado y ejecutado en conjunto.
Reflexión
Ambos fueron condenados, pero al acabar la serie, no hay una sensación de resolución del delito. Quedan subyacentes muchas dudas, como:
¿Si planificaron ambos, miembros de la policía un asesinato, cómo es posible que hayan dejado tantos cabos sueltos?
¿Por qué la vida sexual de Rosa tuvo tanta importancia para definir su culpabilidad? quizás ¿Por qué el único hecho irrefutable fue la muerte pero no el cómo, ni quién?
¿Tal vez, la fiscalía necesitaba crear un monstruo por medio de una vida sexual laxa, hecho que suele verse como alguna perversión maligna?
¿Fue un juicio machista?
La lógica me dice que una pareja que planifica un asesinato, no sólo planifica la muerte, sino lo que viene después y más si ellos conocen desde adentro el accionar de los cuerpos de seguridad respecto a un hecho de tal naturaleza. Por tanto, se me antoja inverosímil que los asesinos no hubieran previsto acciones para desconectarse de una posible acusación de crimen pasional, ponerse de acuerdo previamente sobre el destino del teléfono móvil del occiso, usar medios más seguros para comunicarse y encuadrar testimonios para evitar contradicciones de cara a una investigación que de todas todas llevaría a la fiscalía a mirar sobre el entorno más cercano de Pedro.
Es por ello que la serie es recomendada, te obliga a pensar como delincuente, como abogado y como ciudadano común. No sé si relata los hechos como fueron, pero sé que siembra en el espectador una duda razonable de si Rosa fue víctima de su independencia sexual y su femineidad o simplemente es una psicopata capaz de un hecho tan deleznable sin ningún tipo de escrúpulos.
Sin duda recomendada!!!