Versión en Español
Era un día como cualquier otro en la vida de un niño llamado Timmy. Sin embargo, ese día era excepcional. Timmy se despertó con una fiebre alta y una sensación de debilidad que no le permitía moverse. Su madre, preocupada por su estado, se aseguró de que estuviera cómodo y le dio un medicamento para bajar la temperatura.
Mientras su madre se retiraba de la habitación, Timmy comenzó a sentirse cada vez más cansado y su mente empezó a vagar. De repente, al cerrar sus ojos y tras haberse acostado en su cama se encontró en un lugar mágico y surrealista. El cielo era de un azul intenso y las montañas se elevaban hacia el cielo como si fueran gigantes. Timmy se sentía confundido y asustado, pero pronto se dio cuenta de que no estaba solo.
En el horizonte, vio a tres figuras que se acercaban a él. Uno era un guerrero valiente, el otro un mago sabio y el último un bardo alegre. El guerrero llevaba una espada brillante y un escudo con un símbolo de protección. El mago portaba un bastón que brillaba con un resplandor mágico. El bardo tocaba una flauta que emitía melodías suaves y alegres.
—¿Quiénes son ustedes? —preguntó Timmy, asustado pero curioso.
—Soy el guerrero de la justicia —dijo el guerrero—. Soy el mago de la sabiduría —añadió el mago—. Y yo soy el bardo de la alegría —terminó el bardo.
—¿Por qué me habéis traído aquí? —preguntó Timmy.
—Estás aquí para librarte de tus miedos —dijo el guerrero—. Estás aquí para descubrir tus partes virtuosas —añadió el mago—. Estás aquí para encontrar la alegría —terminó el bardo.
Timmy se sintió confundido, pero pronto se dio cuenta de que los tres eran una proyección de sus partes virtuosas. El guerrero representaba su valor, el mago su sabiduría y el bardo su alegría. Juntos, comenzaron a viajar por el mundo mágico, enfrentándose a monstruos y criaturas extrañas.
El primer monstruo que encontraron fue un dragón que respiraba fuego. El guerrero se adelantó y lo enfrentó con su espada. El dragón era fuerte, pero el guerrero era valiente y logró derrotarlo. El mago utilizó su bastón para curar las heridas de Timmy y el bardo cantó una canción que lo animó.
Después de derrotar al dragón, el grupo continuó su viaje. Encontraron un bosque oscuro y peligroso, lleno de árboles que parecían moverse y hacer ruidos extraños. El bardo comenzó a tocar su flauta y la música lo protegió de los peligros del bosque. El guerrero y el mago lo acompañaron, y juntos lograron superar el peligroso camino.
Finalmente, llegaron a un valle hermoso y pacífico. En el centro del valle había un lago que reflejaba el cielo azul. El grupo se sentó en la orilla del lago y disfrutó de la paz y la belleza del lugar.
—¿Por qué nos has traído aquí? —preguntó Timmy.
—Has llegado a tu destino —dijo el guerrero—. Has superado tus miedos —añadió el mago—. Has encontrado la alegría —terminó el bardo.
Timmy se sintió orgulloso de sí mismo. Había encontrado la alegría y la paz.
De repente, Timmy se despertó en su cama. Su madre estaba a su lado, sonriendo.
—¿Cómo te sientes, Timmy? —preguntó.
—Me siento bien —respondió Timmy.
Su madre sonrió y lo abrazó.
—Eso es lo que importa —dijo—. Ahora, descansa y recupera tu energía.
Timmy se durmió de nuevo, pero esta vez no tuvo más sueños. Sabía que había enfrentado sus miedos y encontrado lo mejor de si; la alegría y la paz.
English Version
It was a day like any other day in the life of a little boy named Timmy. However, this day was exceptional. Timmy woke up with a high fever and a feeling of weakness that would not allow him to move. His mother, concerned about his condition, made sure he was comfortable and gave him medicine to lower his temperature.
As his mother left the room, Timmy began to feel increasingly tired and his mind began to wander. Suddenly, as he closed his eyes and after lying down on his bed he found himself in a magical and surreal place. The sky was a deep blue and the mountains were rising into the sky like giants. Timmy was confused and frightened, but soon realized he was not alone.
On the horizon, he saw three figures approaching him. One was a brave warrior, the other a wise wizard and the last a cheerful bard. The warrior carried a shining sword and a shield with a symbol of protection. The wizard carried a staff that glowed with a magical radiance. The bard played a flute that emitted soft, cheerful melodies.
-Who are you? -asked Timmy, frightened but curious.
-I am the warrior of justice," said the warrior. I am the wizard of wisdom," added the wizard, "and I am the bard of joy," finished the bard.
-Why have you brought me here? -asked Timmy.
-You are here to get rid of your fears," said the warrior. You are here to discover your virtuous parts," added the wizard. You are here to find joy," finished the bard.
Timmy was confused, but soon realized that the three were a projection of his virtuous parts. The warrior represented his courage, the wizard his wisdom and the bard his joy. Together, they began to travel the magical world, facing monsters and strange creatures.
The first monster they encountered was a fire-breathing dragon. The warrior stepped forward and faced it with his sword. The dragon was strong, but the warrior was brave and managed to defeat it. The wizard used his staff to heal Timmy's wounds and the bard sang a song that cheered him up.
After defeating the dragon, the group continued their journey. They found a dark and dangerous forest, full of trees that seemed to move and make strange noises. The bard began to play his flute and the music protected him from the dangers of the forest. The warrior and the wizard accompanied him, and together they managed to overcome the dangerous path.
Finally, they came to a beautiful and peaceful valley. In the center of the valley was a lake that reflected the blue sky. The group sat on the shore of the lake and enjoyed the peace and beauty of the place.
-Why did you bring us here? -Timmy asked.
-You have reached your destination," said the warrior. You have overcome your fears," added the wizard. You have found joy," finished the bard.
Timmy felt proud of himself. He had found joy and peace.
Suddenly, Timmy woke up in his bed. His mother was beside him, smiling.
-How are you feeling, Timmy? -she asked.
-I feel fine," Timmy replied.
His mother smiled and hugged him.
-That's all that matters," she said. Now, rest and get your energy back.
Timmy fell asleep again, but this time he had no more dreams. He knew he had faced his fears and found his best; joy and peace.
Relato creado para el concurso creado por @hispaliterario
Aprovecho para invitar a @vickaboleyn @oswaldotorres @c1udadan0x en la participación de esta dinámica.
Fuente de la imagen
https://pixabay.com/es/photos/chico-ni%C3%B1o-retrato-rostro-alegr%C3%ADa-5355710/