Hola a toda la querida comunidad de Hive, en esta ocasión les traigo un tema diferente. Se trata de esas historias en donde recuerdas que aunque el mundo continúe, es bueno que nuestros mundos puedan detenerse por un instante a apreciar todo lo que coexiste a nuestro alrededor… y sin embargo, casi siempre ignoramos las señales que nos invitan a hacer de esto un disfrute dentro de nuestra rutina.
Espero que les guste.
SPANISH
-Habría sido incómodo decirle la verdad con lo ilusionada que se veía.
Él la miró avergonzado, tocándose ambas manos con las yemas de los dedos solo guardaba silencio, escuchando acerca de lo ocurrido.
-Tenía miedo de que la lastimaran y aún así le dije que fuera con él cuando vi claras las señales… - se secó la naríz con la punta de un pañuelo blanco.
-Pero hiciste lo correcto… - Contestó Henry anotando todo en su pequeña libreta - Además tú no eras consciente del tipo de persona que es tu jefe…
Ella lo miró y asintió.
-Tenías la experiencia… pero no tenías nada que probara tu juicio, hacerte un lado era lo más saludable en cuestión…
-Y lo hice, abogado… pero me arrepiento.
Henry dió un pesado suspiro y cerró su libreta, se levantó y con una señal le pidió a su cliente que se levantara. Acompañó a la mujer afuera y antes de irse la detuvo:
-A partir de ahora le informo que su caso lo llevará a cabo el abogado Arturo.
La mujer lo miró confundida.
-¿Puedo preguntar por qué?
Él sonrió.
-Me retiro, hoy es mi último día en este bufete - apretó los labios y luego los relajó - Pero no se preocupe, el abogado Arturo es tan responsable como yo… lo recomiendó ampliamente.
La vida estaba girando para él en otra dirección. El cáncer de pulmón estaba avanzado y las cotizaciones que había hecho, junto a los años de servicio eran suficientes para irse de una vez de aquel lugar.
Henry sacaba las cosas de su oficina en cajas diminutas, puesto que no pensaba llevarse siquiera el viejo escritorio, o el chifonier caoba, o la cama inflable que durante todos aquellos años le habían servido. Ahora mismo su vida era un complejo de desastres…
Se había divorciado y había perdido su casa en la separación de bienes, su madre murió hace medio año y aún le guardaba religiosamente el luto y poco después murió su padre. Treinta y cinco años de servicio y más cotizaciones de las que podía contar, entregando su juventud a resolver los problemas de los demás y solo una vez se había tomado vacaciones… Esa vida a la que había jugado ya no era la vida que él deseaba.
Así que presentó su carta de renuncia a pocos meses de poder jubilarse… ¿ Pero a qué costo? Ya se consideraba muy viejo para arreglar la relación con sus hijos… ya había pasado el tiempo para enmendar las cosas con su ex esposa… y mientras cogía sus cosas solo podía pensar en todas esas salidas que rechazó, esos bailes a los que no fue, esas noche que no durmió en casa y en todos esos momentos que pudo ser feliz y en cambio había decidido llenarse de problemas… que según caían sobre sus hombros, pero la única carga que tenía, era la de disociar por completo su realidad, creyendo que luego tendría tiempo de experimentar justamente lo que no se repetiría.
Salió de su oficina y decidió no ir a despedirse de quien seguía siendo su jefe, ya que estaban en horario laboral y a esta hora estarían en la sala de juntas.
Henry suspiró, salió del edificio y metió las cosas en su auto.
¿Qué haría ahora? Era algo difícil de explicar… tomó su telefono, hizo una llamada y tú le contestaste… Henrry te hizo esa misma pregunta:
¿Qué harías tú ahora? Sabiendo que ya tienes el tiempo que siempre quisiste, el dinero suficiente para vivir tranquilo y la certeza de que lo que elijas será la decisión correcta
ENGLISH
-It would have been awkward to tell her the truth as excited as she looked.
He looked at her embarrassed, touching both hands with his fingertips, just keeping silent, listening about what happened.
-I was afraid she would be hurt and yet I told her to go to him when I saw the signs clearly..." he wiped his nose with the tip of a white handkerchief.
-But you did the right thing..." Henry answered, writing everything down in his little notebook, "Besides, you were not aware of the kind of person your boss is...".
She looked at him and nodded.
-You had the experience... but you had nothing to prove your judgment, so stepping aside was the healthiest thing to do...
-And I did, counselor... but I regret it.
Henry gave a heavy sigh and closed his notebook, stood up and with a signal asked his client to rise. He escorted the woman out and before leaving, he stopped her:
-From now on I inform you that your case will be handled by attorney Arturo.
The woman looked at him confused.
-May I ask why?
He smiled.
-I am retiring, today is my last day in this law firm - he pursed his lips and then relaxed them - But don't worry, lawyer Arturo is as responsible as I am... he highly recommended him.
Life was turning for him in another direction. The lung cancer was advanced and the contributions he had made, along with the years of service were enough to get the hell out of that place.
Henry moved things out of his office in tiny boxes, since he didn't plan to take even the old desk, or the mahogany chiffonier, or the inflatable bed that had served him for all those years. Right now his life was a disaster complex.....
He had been divorced and had lost his house in the separation of property, his mother had died half a year ago and he was still mourning her religiously, and shortly after that his father died. Thirty-five years of service and more contributions than he could count, giving his youth to solving other people's problems and only once had he taken a vacation... That life he had played at was no longer the life he wanted.
So he submitted his letter of resignation a few months away from retirement... But at what cost? He already considered himself too old to fix the relationship with his children... the time had passed to make amends with his ex-wife... and as he picked up his things he could only think of all those outings he refused, those dances he did not go to, those nights he did not sleep at home and all those moments he could have been happy and instead he had decided to fill himself with problems.... that as they fell on his shoulders, but the only burden he had, was to completely dissociate his reality, believing that later he would have time to experience just what would not be repeated.
He left his office and decided not to say goodbye to the man who was still his boss, since they were on business hours and at this time they would be in the boardroom.
Henry sighed, walked out of the building and put his things in his car.
What would he do now? It was hard to explain... he picked up his phone, made a call and you answered... Henry asked you that same question:
What would you do now? Knowing that you already have the time you always wanted, enough money to live in peace and the certainty that whatever you choose will be the right decision?
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