This week in my TBT my children will not be the protagonists, but me, because checking my Facebook gallery, which I barely access anymore, I saw some photos that one of my students took during the years when I was the head of the School of Social Communication at a University in Araure-Portuguesa state.
I was surprised to see the change not only physically but also mentally that I have had since that date (2014) until now, and although I miss that time, I am very thankful to have lived it, as that has been, among all, the job that I remember with affection the most.
During the end of the semester, each professor of practical subjects in the final years made the students in some way face the labor field, so it was common to see art exhibits, magazines, or any other printed media, posters, and even short films projected on televisions in the university hallways.
All of this was part of the final evaluation and with the necessary permission and supervision from me as the highest authority of the career. Even being a nucleus, we caught the attention of the main leadership and the dean's office, who at some point came to see these exhibits and even replicated them in the other nuclei of the career at a regional level.
One day, one of my students asked me to help her take some photos for a comic they had to make, and by agreeing, thinking it was about advice regarding framing, lighting, or the story itself, I ended up being the protagonist of her tale.
That day the roles were reversed, my student, María José Moreno, with whom I lost contact after her graduation, dedicated herself to directing me to achieve what she needed for her story, which, despite being quite simple, met the teacher's requirement.
By then, I was completely opposed to being in front of cameras, and it really bothered me when they asked me to pose for a photo, even if it was a family one. Yes, nothing like what I am today.
Among laughter, she managed to take only the three photos she needed, the rest was up to her. I loved that she took her job very professionally and it made me proud to see how some of the techniques and knowledge that I had shared with them in previous semesters were being put into practice. My work as a teacher had not been in vain.
On the day of the presentation, and being part of the judging panel, I reviewed each of the comics presented, seeing with some embarrassment my face being part of her story. That day, the rest of my students began to see me with different eyes, some closer and more confident to ask questions and approach the office if necessary.
So beyond my "stardom" moment, this activity ensured that my management in the position was much more effective in establishing trust with the students.
Esta semana en mi TBT mis hijos no serán los protagonistas, sino yo, pues revisando mi galería de facebook, al que ya casi ni accedo, vi unas fotos que me tomó una de mis alumnas durante los años en los que fuí la jefe de la escuela de Comunicación Social en una Universidad de Araure-estado Portuguesa.
Me sorprendió ver el cambio no solo físico sino también mental que he tenido desde esa fecha (año 2014) hasta ahora, y aunque extraño aquella época, agradezco mucho haberla vivido, pues ese ha sido de entre todos, el empleo que más recuerdo con cariño.
Durante los finales de semestre, cada profesor de las materias prácticas de los últimos años, hacían que los estudiantes se enfrentaran de alguna manera al campo laboral, por lo que en los pasillos de la universidad era común ver muestras de arte, revistas o cualquier otro medio impreso, afiches, y hasta cortometrajes proyectados en televisores.
Todo esto era parte de la evaluación final y con el debido permiso y supervisión de mi parte como máxima autoridad de la carrera. Inclusive, siendo nosotros un núcleo, llamamos la atención de la jefatura principal y el decanato, quienes en algún momento se apersonaron a ver estas muestras y hasta hicieron la réplica en los demás núcleos de la carrera a nivel regional.
Un día, una de mis estudiantes me pide que la ayude a realizar unas fotos para un comic que debían hacer, y al acceder pensando que era asesorías con respecto a encuadres, iluminación o la misma historia, terminé siendo la protagonista de su cuento.
Ese día se cambiaron los papeles, mi alumna, María José Moreno, con quien perdí contacto luego de su graduación, se dedicó a dirigirme para lograr lo que ella necesitaba para su historia, la cual a pesar de ser bastante simple, cumplía con la consigna del docente.
Para aquel entonces, yo era completamente negada a estar frente a cámaras, y realmente me resultaba molesto cuando me pedían posar para una foto, así fuera familiar. Si, nada que ver a lo que soy en la actualidad.
Entre risas, logró sacarme solo las tres fotos que necesitaba, lo demás ya corría por su cuenta. Me encantó que se tomó su función de manera muy profesional y hasta me dio mucho orgullo ver cómo algunas de las técnicas y conocimientos que les había compartido durante semestres anteriores, eran puestos en práctica. Mi trabajo como docente, no había sido en vano.
Llegado el día de la presentación, y siendo parte del jurado calificador, revisé uno a uno los comics presentados, viendo con cierta vergüenza mi rostro formando parte de su historia. Ese día, el resto de mis alumnos empezó a verme con otros ojos, unos más cercanos y con más confianza de preguntar y de acercarse a la oficina en el caso de ser necesario.
Así que más allá de mi lanzamiento al "estrellato", esta actividad logró que mi gestión en el cargo fuera mucho más efectivo en lo que a establecer lazos de confianza con los alumnos se trataba.
Foto/Photo by: Compartidas en mi facebook por majomoreno
Edición/Edited by @mamaemigrante using canva
Translated and formatted with Hive Translator by @noakmilo.
