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ESPAÑOL
Desde muy pequeña mi mamá ha dicho que mis dientes no han sido de muy calidad, desde los 6 años me llevaba a odontología. Como ella trabajaba en el ambulatorio del municipio donde crecí, pues sabía cuando había médico odontólogo y cuando los equipos estaban operativos, así que durante mi niñez fui muchas veces a odontología.
Lo que más recuerdo de esa época es que los días de las consultas llegábamos muy temprano, casi de madrugada, y mientras esperábamos nuestro turno, se hacía la hora del desayuno. Mi mamá me compraba un pastelito y una malta, esa era la mejor parte. Ahora cada vez que tomo malta recuerdo mis visitas al odontólogo.
Para mí, nunca fue doloroso ir a odontología, debe ser porque nunca me colocaron anestesia para realizar los arreglos en mis dientes. Muchas personas me han dicho que no duele, pero le tengo miedo a las inyecciones así que prefiero soportar mientras arreglan mis dientes a que me inyecten las encías. Extraña decisión ¿verdad?
En la actualidad tengo la necesidad de ir a repararme una muela que me está molestando, tengo presente que desde pequeños se nos enseña que debemos ir una vez al año a visitar al odontólogo, y de esta manera eviaremos que las caries causen un daño irreparable y tengamos que extraer nuestros preciados dientes.
Esta fue mi participación en en concurso semana de la comunidad @TopFiveFamily Observa piensa escribe, puedes visitar la publicación aquí
ENGLISH
Since I was very young, my mother said that my teeth were not of very good quality, and since I was 6 years old she used to take me to the dentist. Since she worked at the outpatient clinic in the municipality where I grew up, she knew when there was a dentist and when the equipment was operational, so during my childhood I went to the dentist many times.
What I remember most about that time is that on the days of the consultations we would arrive very early, almost at dawn, and while we were waiting for our turn, it was time for breakfast. My mom would buy me a pastry and a malt, that was the best part. Now every time I drink malt I remember my visits to the dentist.
For me, it was never painful to go to the dentist, it must be because they never put me under anesthesia to fix my teeth. Many people have told me that it doesn’t hurt, but I’m afraid of injections so I’d rather endure while they fix my teeth than have my gums injected. Strange decision, isn’t it?
At present I have the need to repair a tooth that is bothering me, I have in mind that since I was a child we are taught that we should go once a year to visit the dentist, and in this way we will avoid that cavities cause irreparable damage and we will have to extract our precious teeth.
This was my participation in the @TopFiveFamily community week contest. Watch what you think, you can visit the publication here
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