Fuente de la imagen, concurso de TopFiveFamily
Buenas noches estimada familia seguimos interactuando y aprendiendo en cada participación. A lo largo de nuestras vidas hemos tenido situaciones muy difíciles, una de ellas es la salud, cuando nos quebrantamos con fiebre, gripe que a veces son virus pasajeros los cuales podemos atacar con remedios caseros como limonadas, infusiones , recurrimos a las recetas de la abuela que nos funcionan y se resuelve el malestar.
Pero cuando llega al punto de necesitar asistencia medica profesional, entramos en pánico porque con las grandes limitaciones que tenemos en Venezuela con el tema de la salud no hay garantías de acceder ni siquiera a lo más básico, implica primeramente los exámenes correspondientes para poder saber el diagnostico real de la patología que se está presentando. Comienza el calvario de buscar el dinero para realizarse los exámenes y buscar el lugar donde los costos sean accesibles corriendo el riesgo que los reactivos no se hayan vencido porque los resultados saldrían alterados ya he tenido experiencia en el caso. Aplica el proverbio lo barato sale caro.
Buscando lo más económico llegamos a presentarnos a varios laboratorios donde nos sacan sangre una y otra vez, es un mal necesario y doloroso además. Cuando llega el diagnostico continua el proceso dependiendo del resultado, el medico determina si se maneja con tratamiento o es inevitable una cirugía.
De ser el segundo caso llegamos al clímax de la angustia porque la lista de insumos para la operación nos paraliza, de donde sacar el dinero para tal fin, sin contar que sigue una nueva etapa de exámenes preoperatorios, nuevamente a sacarnos sangre , sorprendentemente se logra pasar y llegar a la solución definitiva del asunto, sea por la resiliencia que hemos desarrollado o por intervención divina en la que creo firmemente.