Visiting the gated community where my daughter and her husband bought a large lot to eventually build their house close to nature, although not so far from the big city of Buenos Aires.
They are city dwellers and like noise and cement, they were born and raised in the Federal Capital where they live with three million other people and although they recognize the peace and tranquility provided by open, airy spaces surrounded by green, They do not intend to stray too far from the cultural and social attractions of this city.
The lot of more than a thousand square meters is located about 70 kilometers from Buenos Aires to the south, on the main route to the city of Mar del Plata. The property has a large interior lagoon with abundant wildlife and they chose one of the lots whose bottom overlooks just one sector of the lagoon.
Water creates a great fascination in people, perhaps because we recognize its vital importance in the life of beings, perhaps for other reasons that do not occur to me at the moment, the truth is that having a mirror of water is very close to our property gives it greater appeal.
In a far corner of the lagoon, where it becomes more rugged and wild, we observe a few birds feeding on what the water mirror bed offers them, the variety is surprising: ducks, coots, the inevitable biguá and roseate spoonbills that many They are confused with flamingos, precisely because of their characteristic coloration.
At one point when the sun went down, we could see a capybara, a giant rodent from the southern hemisphere that is not too afraid of people and is showing up everywhere, here we could only see one and the photograph was not good, probably because of the rush to photograph it before it disappeared and the phone's digital zoom which is invariably not a good choice.
The designers of the enterprise wisely built several viewpoints over the lake, there is a large table in the center and benches around it, oddly enough, we did not see anyone enjoying the sunset and the beautiful views of the place.
I just hope that soon they can make a house there and that they invite me, of course.
De visita por el barrio cerrado donde mi hija y su esposo compraron un gran lote para en algún momento construir su casa cerca de la naturaleza, aunque no tan lejos de la gran ciudad de Buenos Aires.
Ellos son citadinos y les gusta el ruido y el cemento, han nacido y se han criado en la Capital Federal donde conviven con otros tres millones de personas y aunque reconocen la paz y la tranquilidad que brindan los espacios abiertos, aireados y rodeados de verde, no pretenden alejarse mucho de los atractivos culturales y sociales de esta ciudad.
El lote de más de mil metros cuadrados está ubicado a unos 70 kilómetros de Buenos Aires hacia el sur, en la principal ruta hacia la ciudad de Mar del Plata. El predio posee una gran laguna interior con abundante vida silvestre y ellos eligieron uno de los lotes cuyo fondo da justamente a un sector de la laguna.
El agua crea una gran fascinación en las personas, quizás porque reconocemos si vital importancia en la vida de los seres, tal vez por otros motivos que no se me ocurren en estos momentos, lo cierto es que tener un espejo de agua muy cerca de nuestra propiedad la dota de un mayor atractivo.
En un recodo alejado de la laguna, donde se hace más agreste y salvaje, observamos unas cuantas aves alimentándose de lo que el lecho del espejo de agua les brinda, la variedad es sorprendente: patos, gallaretas, el infaltable biguá y espátulas rosadas que muchos confunden con flamencos, justamente por su coloración característica.
En un momento al caer el sol pudimos observar un carpincho, un roedor gigante del hemisferio sur que no le tiene demasiado miedo a las personas y andan mostrándose por todos lados, aquí solo pudimos observar uno y la fotografía no fue buena, probablemente por el apuro de retratarlo antes que desapareciera y el zoom digital del teléfono que invariablemente no es una buena elección.
Los diseñadores del emprendimiento con buen tino construyeron varios miradores sobre el lago, hay una gran mesa en el centro y bancos a su alrededor, aunque parezca mentira, no vimos a nadie disfrutar del atardecer y de las hermosas vistas del lugar.
Solo espero que pronto puedan hacer una casa allí y que me inviten, por supuesto.
Las fotografías son de mi propiedad excepto las que menciono la fuente.
The photographs are my property except those mentioned by the source.
Héctor Gugliermo
@hosgug