Es la aventura vespertina que me impulsa para ejercitar a mi espíritu para encontrarme con el paisaje de mi ciudad natal, Caicara del Orinoco, Venezuela. Me interesa buscar los encantos en la orilla del río. Me siento irresistiblemente enamorado por la vida natural que fluye en el agua, la roca, la blanca arena y la tierra arcillosa. Aquí tomo las fotografías necesarias que me permiten capturar el paisaje con el dejo que me deja en el alma, la brisa orinoquense y el olor a pescado que tiene el Orinoco.
Con los espíritus que dibujan la tarde con los arreboles, hago con cuidado el experimento de esta esquela de un delicioso soneto que le ofrezco al río Orinoco.
En la sábana del cielo, pinceladas de fuego,
El sol se despide en un adiós ardiente,
Mientras el río crece, con rugido vehemente,
Sobre la acrisolada roca posa su ósculo.
La tarde, cuál viuda triste, en manto bruno se viste,
Y la sombra se estira, con lúgubre lamento,
Recordando a la amada que partió al viento,
Dejando un vacío eterno que el alma resiste.
El río, con torrente de lágrimas desbordadas,
Gime por la ausencia de su dulce desnudez,
Y la roca, testigo fiel de su partida,
Guarda en su silencio la más profunda tristeza.
En el crepúsculo, la fogata se enciende,
Y el amor ausente en el herbaje se prende
En el puerto de Caicara del Orinoco, 25 de abril de 2024
It is the evening adventure that drives me to exercise my spirit to meet the landscape of my hometown, Caicara del Orinoco, Venezuela. I am interested in looking for the charms of the riverbank. I am irresistibly enamoured by the natural life that flows in the water, the rock, the white sand and the clay soil. Here I take the necessary photographs that allow me to capture the scenery with the breeze of the Orinoco and the smell of fish that the Orinoco leaves in my soul.
With the spirits that draw the afternoon with the gusts, I carefully experiment with this outline of a delicious sonnet that I offer to the Orinoco River.
On the sheet of the sky, brushstrokes of fire,
The sun bids farewell in a fiery farewell,
While the river grows, with vehement roar,
On the pristine rock it lays its osculum.
The evening, like a sad widow, is clothed in a misty mantle,
And the shadow stretches, with mournful lament,
Remembering the beloved who departed to the wind,
Leaving an eternal void that the soul resists.
The river, with a torrent of overflowing tears,
Groans for the absence of her sweet nakedness,
And the rock, faithful witness of her departure,
Keeps in its silence the deepest sadness.
In the twilight, the fire is lit,
And the absent love in the grass is kindled
In the port of Caicara del Orinoco, 25 April 2024
REFERENCIAS: Las muestras fotográficas tomadas con mi teléfono realme Pro 8 son de mi propiedad patrimonial.
REFERENCES: The photographic samples taken with my realme Pro 7 phone are my property
Traduccion por Deepl
Translation by deepl
Caicara del Orinoco, Bolívar, Venezuela