Yesterday I had my fourth session with the psychologist and it was one of the best, why one of the best? Because I didn't cry! In fact, I laughed too much and I hadn't done it for a long time, I didn't laugh in that therapeutic way that at any moment can turn into crying, but mine didn't, I have already cried a lot so I gave myself a well-deserved break from crying, although I still did it later, but I don't care about that, I like to cry, but everything in its own time.
This being non-binary, belonging to the transgender community, is not easy to assimilate, and much less to explain, both to those people you love, both to yourself, because it requires a lot of information that is not so easy to obtain, and often the information can blind us, but I have three wonderful people who have accompanied me since I said it, no matter that some joined as the months went by, but I already have more than half a year on this new path for me and I would not have made it without them, I love them very much.
No, we do not talk every day, nor every week, nor every month, they or I usually disappear because we are people who need a lot of time to solar and when we can is that we share our existence with the rest of the world, I still do not share my existence with the rest of the world, but I am taking small internal steps to do it very soon, I want to do it, and the excitement of that moment coming overcomes the anxiety it causes me, and just knowing that makes me more excited, because a few months ago I would not even have dared to think of doing it, and now I have the full security and confidence that I will do it.
What did I mean by all that? That I am changing my name, and it is something that does not surprise me at all to be doing, because when I was 8 years old I thought that the name I had at some point I was going to change it, that I had only borrowed it and that at some point in my life I would have the opportunity to choose the real name I wanted to use, a name that I felt that represents me and with which the discomfort does not exist, and although it is clear that I had forgotten it until recently, that thought stayed with me forever, and although I didn't even express it, or know how to identify that feeling, I never felt comfortable with my name, and I am finally taking that step, few people know it, I still reserve the right to share it, but I am doing it and it is something incredible.
The emotion that invades me when someone writes or says my new name is bigger than me, it makes me want to laugh, to hug something very tight until it explodes, a giant smile takes over my face, and every time my desire to cry is decreasing, every time the validation, acceptance, and feeling that they want me, that they love me, stops being a foreign emotion and starts to be something I have to get used to, in principle because I love myself, and I am allowing other people to do it by sharing my true identity, my true feeling, my true being, that's why I stop crying more and more when someone says my new name, although I do want to cry when I write this.
I shared my name with my psychologist! We had this whole long and extensive conversation about what I wanted her to call me, what I was comfortable with and what I wasn't comfortable with, and it was a conversation that I was very afraid to have, which is completely illogical, I mean, she knows most of my childhood traumas, am I going to be afraid to tell her my new name and talk about this whole process of practically being born again? And the relief I felt was incredible, and we laughed too much, at least until she made me want to cry again and I didn't let myself, I didn't cry.
Why did she make me want to cry again? Because in a way I am going through a grieving process in which I am saying goodbye to many things from my past, things that only hurt me, and saying goodbye is just as hard as working on them, although the two things go hand in hand, but anyway, she made me talk to the child in me, she made me tell her all those things I needed to be told at that moment, and I think I am going to cry at this moment remembering everything I said, because at that moment I took it very calmly, and I have been talking to my inner child for years and I know almost perfectly what to say and what not to say, and although it has become easier and easier, like yesterday in the session, there are other moments where that lump forms in my throat that do not let me speak and I can only cry without consolation.
My new name I will share with you maybe this month, maybe next month, at least you already know that it starts with the letter 'K', because I made that small but giant change here in my profile, and I must admit that it is my first social network where I do it, so get ready for a new presentation from me, because that's going to be spectacular, I already have a draft written, but I haven't even read it for the second time, because I said so many things that I still haven't process and assimilate completely, so give me time, I'm giving it to myself so I can do everything at my own pace and without rushing things. I love me, see you later.
Ayer tuve mi cuarta sesión con la psicóloga y fue una de las mejores, ¿por qué una de las mejores? ¡Porque no lloré! Es más, me reí demasiado y tenía mucho tiempo que no lo hacía, que no me reía de esa forma terapeútica que en cualquier momento se puede volver llanto, pero la mía no lo hizo, ya he llorado mucho así que me di un descanso muy merecido de llorar, aunque igual lo hice después, pero eso no me importa, me gusta llorar, pero todo a su tiempo.
Esto de ser no binarie, pertenecer a la comunidad transgénero, no es fácil de asimilar, y mucho menos de explicar, tanto a aquellas personas que quieres, tanto a ti misme, porque requiere de mucha información que no se logra obtener tan fácil, y muchas veces la información puede llegar a cegarnos, pero tengo tres personas maravillosas que me han acompañado desde que lo dije, sin importar que algunes se unieran con el paso de los meses, pero ya tengo más de medio año en este nuevo camino para mí y no lo hubiera logrado sin elles, les amo mucho.
No, no hablamos todos los días, ni todas las semanas, ni todos los meses, elles o yo solemos desaparecernos porque somos personas que necesitamos mucho tiempo a solar y cuando podemos es que compartimos nuestras existencias con el resto del mundo, yo todavía no comparto mi existencia con el resto del mundo, pero estoy dando pequeños pasos internos para hacerlo muy pronto, porque quiero hacerlo, y la emoción de que llegue ese momento supera a la ansiedad que me provoca, y tan solo saber eso me emociona más, porque hace unos meses ni siquera me hubiera atrevido a pensar a hacerlo, y ahora tengo la seguridad plena y la confianza de que lo haré.
¿Qué quise decir con todo eso? Que estoy cambiando de nombre, y es algo que no me sorprende en absoluto estar haciendo, pues cuando yo tenía 8 años pensaba que el nombre que tenía en algún momento me lo iba a cambiar, que solo me lo habían prestado y que en algún momento de mi vida tendría la oportunidad de dedicir el verdadero nombre que quería usar, un nombre que sintieera que me representa y con el que la incomodidad no existe, y aunque claro está que lo había olvidado hasta hace poco, ese pensamiento se quedó conmigo siempre, y aunque ni siquiera lo expresara, o supiera identificar ese sentimiento, nunca me sentí comode con mi nombre, y finalmente estoy dando ese paso, pocas personas lo saben, aún me reservo el derecho de compartirlo, pero lo estoy haciendo y es algo increíble.
La emoción que me invade cuando alguien escribe o dice mi nuevo nombre es más grande que yo, me dan ganas de reír, de abrazar algo muy fuerte hasta que explote, una sonrisa gigante se adueña de mi cara, y cada vez las ganas de llorar van disminuyendo, cada vez la validación, la aceptación, y el sentir que me quieren, que me aman, deja de ser una emoción ajena y comienza a ser algo a lo que me debo acostumbrar, en principio porque yo me amo, y estoy permitiendo que otras personas lo hagan al estar compartiendo mi verdadera identidad, mi verdadero sentir, mi verdadero ser, por eso dejo de llorar cada vez más cuando alguien dice mi nuevo nombre, aunque sí quiero llorar al escribir esto.
¡Compartí mi nombre con mi psicóloga! Tuvimos toda esta conversación larga y extensa sobre cómo quería que me dijera, con qué me sentía cómode y con qué no, y es una conversación que me generaba mucho miedo de tener, cosa completamente ilógica, o sea, ella sabe la gran mayoría de mis traumas infantiles, ¿me va a dar miedo decirle mi nuevo nombre y hablar sobre todo este proceso de prácticamente nacer de nuevo? Y el alivio que sentí fue increíble, y nos reímos demasido, al menos hasta que ella me hizo querer llorar de nuevo y no me dejé, no lloré.
¿Por qué me quiso querer llorar de nuevo? Porque en cierta forma estoy viviendo un proceso de duelo en el que le digo adios a muchas cosas de mi pasado, cosas que solo me hicieron daño, y despedirme es igual de difícil que trabajar en ellas, aunque las dos cosas van de la mano, pero en fin, me hizo hablarle al niñe en mí, me hizo decirle todas esas cosas que necesité que me dijeran en ese momento, y creo que voy a llorar en este momento recordando todo lo que dije, porque en ese momento me lo tomé con mucha calma, y es que llevo años hablándole a mi niñe interior y sé casi a la perfección qué decirle y qué no, y aunque se ha vuelto cada vez más fácil, como ayer en la sesión, hay otros momentos donde se forma ese nudo en la garganta que no me deja hablar y solo puedo llorar sin consolación.
Mi nuevo nombre se los compartiré quizás este mes, quizás el mes que viene, al menos ya saben que comienza por la letra 'K', pues hice ese pequeño pero gigante cambio aquí en mi perfil, y debo reconocer que es mi primera red social donde lo hago, así que prepárense para una nueva presentación de mi parte, porque eso va a ser expactacular, ya tengo un borrador escrito, pero ni siquiera lo he leído por segunda vez, pues dije tantas cosas que aún no proceso y asimilo del todo, así que denme tiempo, que yo me lo estoy dando para poder hacer todo a mi ritmo y sin apresurar las cosas. Me amo, hasta luego.