Ha llegado la hora que todos los padres anhelamos durante todo el día, y no lo nieguen, ha llegado la hora en que mi bebé duerme y debo admitir que es el momento del día en que puedo dedicar tiempo a escuchar mis propios pensamientos.
Mientras la veo dormir a mi lado, me doy cuenta de cómo ha pasado el tiempo y es que como leí hace algunos días:
Los días con un bebé se pasan lentos pero los meses pasan volando
Y es tan cierto. Hace algunas semanas le comentaba a mi hermana que tenía 9 meses anhelando que llegara la noche para que llegara la hora de dormir, por supuesto, cada mes lo anhelo menos porque van cambiando las cosas.
Y sobre eso reflexiono en este momento, cómo van pasando las etapas de la maternidad. Recuerdo los primeros días después de que nació mi bebé, realmente desde el primer día no dudé de mi capacidad para alimentarla con lactancia materna,y ahí estaba yo, casi todo el día entre amamantar, cambiar pañales y lo horrible de tratar de sacar bien los gases y lo difícil que era hacerla dormir. Por otra parte, estaba la gente dándome demasiados consejos y opiniones que no quería escuchar porque realmente no hubo uno que me funcionara, y mientras me daban consejos estaba yo tratando de poner la mente en blanco mientras miraba mis pies que me parecían raros luego de deshincharse 😅
Durante los primeros 3 meses, apenas llegaban las 6 pm y a mi bebé le comenzaba un llanto que me era imposible calmar hasta que la bañaba y la iba a mecer en una hamaca mientras amamantaba. A veces pasaba hasta 2 horas tratando de dormirla. Realmente esos primeros 3 meses se me hicieron eternos, sin mencionar la tristeza inmensa que sentía.
Mis padres y abuelas decían que lloraba y dormía poco porque la teta no era suficiente para dejarla satisfecha a pesar de que yo daba a libre demanda, yo me había informado mucho y sabía que si daba a libre demanda sí era suficiente. Cuando al fin llegó el momento de iniciar la alimentación complementaria debo admitir que sentí un gran alivio porque y es que debemos admitir que la LME es esclavizante.
Luego estaba que ella no es muy dada con las demás personas y siempre quería estar pegada a mí y sin decir mentiras, hasta el mecánico quería opinar sobre eso, decía que yo le había dado mucho brazo y es que, desde que mi hija nació, yo decidí que iba a fomentar el apego seguro, ese con el que le das a tu hijo la seguridad de que vas a satisfacer sus necesidades y a esta edad, el contacto físico es una necesidad, y mamá es el lugar seguro para el bebé. Pero bueno, no puedo ir por la vida explicando mis decisiones como madre a todos; yo decidí eso sabiendo que llega el momento en que ella misma tendría la necesidad de independencia.
Por otra parte, estaba ese cansancio excesivo y esa debilidad que sentía desde que la bebé tenía 5 meses y comencé a bajar de peso a pesar de que comía bien. Eso me llevó a decidir destetar el mismo día que cumplió 8 meses y no faltó quien dijera "pero está muy chiquita, deberían ser 2 años", que por cierto, fue un destete con mucho amor y demasiaaaaaaaaaaado fácil, pensé que sería horrible. Y no juzgo a quien continúe con la lactancia durante años, pero honestamente yo ya no me sentía bien y quería seguir atendiendola con amor.
En fin, ahorita la veo dormir, y pienso en todas las etapas que hemos superado juntas y lo que aún nos falta. Superamos los gases, la lactancia, el cansancio crónico, los problemas de sueño (ya se duerme sola 🥳), el tenerla siempre en brazos; pero nos falta las pataletas, preescolar, aprender a leer y la adolescencia 😱
Solo espero seguir haciéndolo con amor y mucha sabiduría.
Una feliz noche para todos 🌃
